Una llamada inesperada en la madrugada casi siempre en sinónimo de malas noticias y para Miguel Fonseca Jiménez la que le hicieron sus familiares hacia las 4:30 a.m. de este martes sin duda lo fue.
El sostén de su familia, su negocio de ebanistería y segundo hogar por más de 15 años, había quedado reducido a cenizas luego de un voraz incendio que empezó dentro del taller, sin que hasta el momento se conozcan las causas.
El taller, está ubicado en un amplio patio de una vivienda ubicada en la calle 23 #16-117, barrio San Antonio, en Soledad.
'Mis familiares, que viven en la casa principal me llamaron y cuando llegue acá ya están las 5 y pico, los Bomberos habían controlado el fuego, pero todo quedó destruido', contó Miguel.
Lo que más pensativo tiene al ebanista es que dentro del lugar habían varios trabajos terminados que debía entregar esta semana.
'Había unos muebles, un closet y unas camas que justo hoy tenía que entregar, ahora no sé cómo voy a hacer para cumplir. No tengo ni teléfonos de los clientes porque todas las facturas se quemaron. Espero que puedan entender lo que pasó', dijo Fonseca Jiménez.
