A finales del año pasado, el Sistema de Alertas Tempranas (SAT) del Ministerio de Justicia y del Derecho reportó y alertó sobre la presencia en el país de cuatro nuevas drogas sintéticas que pueden 'generar riesgos para la salud'.
La entrada de estas nuevas sustancias supone la creación de nuevos métodos para su distribución, y es en este punto donde las autoridades intensifican sus labores.
Precisamente, a mediados de diciembre pasado la Policía Metropolitana de Barranquilla desarticuló la banda ‘los Gomelos’, una estructura dedicada al tráfico de estupefacientes al menudeo en universidades, discotecas al norte de la ciudad, fiestas electrónicas y after party en el área metropolitana de la ciudad.
Pero la forma de hacer llegar la droga a su consumidor, según la Fiscalía y la Sijín, cambia con respecto 'a las necesidades de quien las requiera'.
Manuel Ruiz Romero, fiscal 61 de la Unidad Antinarcóticos de la Fiscalía Seccional Atlántico, manifestó que en la ciudad, en los últimos 8 años, las autoridades han podido detectar, al menos, 13 tipos de alucinógenos sintéticos con los que se 'contaminan' objetos y productos 'inimaginables'.
Sentado en su oficina, el funcionario sacó un neceser de plástico con varios compartimientos, los fue separando y en su interior se aprecia, de entrada, una variedad de pastillas de colores, envoltorios de golosinas, jeringas y unos pequeños frascos de vidrios que contienen líquidos y otras sustancias.
'Acá tenemos una variedad de sustancias de origen natural y las llamadas nuevas sustancias psicoactivas (NSP), que son conocidas en el mercado como drogas de diseño o sintéticas. Entre esas están la ketamina, fenetilaminas, éxtasis, entre otras', explicó el fiscal.