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Un hombre llegó a un almacén de venta de artículos para el hogar y la construcción, ubicado en el norte de Barranquilla. Se acercó hasta la sección de materiales eléctrico y cogió ocho rollos de cable número 12 (1.600 metros).

Luego se acercó a uno de las cajas y canceló la compra que había realizado con dos tarjetas de crédito diferentes, por valor de un millón 960 mil pesos.

Sin embargo, en el lugar se encontraba un funcionario de Incocrédito, entidad encargada de la prevención de fraude electrónico, a quien le pareció extraño el tipo de compra por la cantidad, así como el pago diverso que realizó el comprador, ante lo cual le solicitó que esperara la verificación de las tarjetas o el reporte que arrojara Incocrédito.

Una vez que el funcionario comprobó que las tarjetas con las que el hombre canceló la compra no estaban a su nombre, alertó a la patrulla del cuadrante que llegó a los pocos minutos y capturó al hombre que fue identificado como David Mauricio Viloria Sánchez.

Los uniformados lo trasladaron hasta las instalaciones de la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía, URI, donde fue dejado a disposición de la Fiscalía 33 Seccional de la Unidad de Estructura de Apoyo, EDA, por el delito de hurto por medios informáticos.