En la capilla de la Penitenciaría El Bosque de Barranquilla permanecen aislados 17 internos pertenecientes al pabellón C del establecimiento de reclusión, luego de que presentaran fiebre alta y otros que llegaron trasladados desde el Hospital de Barranquilla, también presentaran el mismo estado de salud.
Así lo confirmó a EL HERALDO la Dirección Regional Norte del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, Inpec.
La medida fue tomada a manera de prevención, toda vez que la Secretaría de Salud Distrital les estará practicando en la mañana de este miércoles la prueba del coronavirus para confirmar o descartar que estén contagiados con la COVID-19.
A principios de marzo se registró un caso sospechoso de un interno en el mismo centro de reclusión, luego que presentara síntomas asociados al coronavirus.
El interno había sido favorecido con un permiso de salida el pasado 2 de marzo y regresó el 5 del mismo mes. Al volver a la prisión presentó una tos persistente, bastante flema y dolores musculares, por lo que el área de sanidad decidió sacarlo del pabellón C, donde se encontraba recluido junto con otros 458 reclusos, y aislarlo en la capilla del penal de manera temporal como medida preventiva.
Sin embargo, el recluso dio negativo luego de que se le practicara la prueba del coronavirus.
A principio de mayo se confirmó el primer caso de la COVID-19 en la Cárcel Distrital El Boque, establecimiento de reclusión que se encuentra ubicado al lado de la Penitenciaría El Bosque que es administrada por el Inpec.
Clemente Fajardo, secretario de Gobierno del Distrito informó en su momento que el interno, de 26 años, ingresó a la cárcel el 6 de marzo y una vez fue confirmado que era positivo para la enfermedad fue aislado para evitar que contagiara a otros reclusos.
