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Una calle del barrio Recreo de Sabanagrande se convirtió en un teatro por una tarde. Niños de todas las edades salieron de sus casas por un breve espacio de tiempo para disfrutar de una película infantil, pero también para aprender sobre la pandemia que enfrenta el mundo, eso sí, guardando el distanciamiento social.

Según contó la trabajadora social Enith Gazabón Serrano, miembro de la Red de Mujeres de la Policía de Atlántico y residente de ese vecindario, la iniciativa surgió de ver la incomodidad de los niños del barrio frente a las restricciones por la expansión del nuevo coronavirus en el departamento. Sin embargo, el propósito no era únicamente entretenerlos, sino ayudarles a entender la pandemia.

'Por mucho que queramos tener a los niños en casa, es muy difícil. A ellos les cuesta entender la magnitud de lo que está sucediendo y eso es comprensible porque ya no tienen la misma forma de vida que antes. De esta situación surgió la idea de empezar a educarlos y sensibilizarlos para que entiendan el riesgo al estar en la calle sin las respectivas protecciones', explicó Enith.

Con la idea inicial, la lideresa se puso en contacto con la Policía de Infancia y Adolescencia del Atlántico para ver qué tan posible y seguro era desarrollar la actividad. Finalmente, con el compromiso de mantener las medidas sanitarias para evitar contagios de COVID-19 y cumpliendo los decretos departamentales por la pandemia, se puso en marcha la iniciativa con un proyector y sillas ubicadas a dos metros de distancia una de la otra.

'Empezamos desde las 4:00 de la tarde cuidando de que se pudiera mantener el distanciamiento y que todos los niños tuvieran sus elementos de bioseguridad, sobretodo el tapabocas', aseguró Enith. Indicó que para ello también fue necesario acordar con los padres una vigilancia permanente del comportamiento bioseguro de los niños.

Cabe destacar que, antes de reproducir la película escogida, se desarrollaron otras dinámicas orientadas a la educación de los menores, principalmente sobre los cuidados que deben tener para evitar contagios, pero también sobre otros temas que implican su seguridad.

'Con los uniformados de la Policía les explicamos las medidas de bioseguridad, por qué deben aplicarlas, cómo deben hacerlo y también hablamos de otros temas como la prevención del abuso sexual. Luego les pusimos la película para desestresarlos y al final es hicimos preguntas sobre lo que les enseñamos. Por sus respuestas, vimos buenos resultados de la actividad', anotó Enith.

Para el equipo que dirigió la actividad esta se trató de una prueba piloto que, debido a los resultados, podría ser aplicado en otros barrios del municipio con el objetivo de hacer más llevadera la cuarentena para los niños y sus familias.

'Fue todo un éxito. Hicimos rifas y entregamos dulces, pero sobre todo contamos con una participación activa de los niños, de manera segura y con todas las medidas sanitarias', concluyó Enith Gazabón.