En la fiesta de este domingo hicieron una ronda de champeta. 'Tiraron pique' y también hubo licor. Por videos difundidos en redes sociales y conocidos por este medio, es evidente que hubo mucha música y disfrute. Lo que sí escaseó fueron los tapabocas y, por supuesto, el distanciamiento social.
A pesar de la COVID-19, se desarrolló 'exitosamente' en el barrio Galán. Decenas de adolescentes –en su mayoría menores de edad– se dieron cita para disfrutar de una 'Covid-tk' o fiesta con un nombre muy acertado: 'Noche ilegal'.
De acuerdo con reportes de testigos y habitantes del barrio antes mencionado, la fiesta clandestina se desarrolló durante la noche del domingo y la madrugada de este lunes en el patio de una vivienda en el sector de la carrera 2 con calle 37.
Los organizadores se identificaron a sí mismos en una publicidad que circuló en redes sociales –principalmente en Facebook– los días previos a la fiesta. Elkin Fernández, Roni De la Hoz y Andrés V. Pérez, aunque aseguraron que se reservaban el derecho de admisión, lograron reunir en un solo lugar a cuatro DJ y a un número de adolescentes que, por mucho, sobrepasaron el límite de seis personas en un recinto cerrado, que corresponde a los protocolos de bioseguridad en una pandemia como la que enfrenta el mundo.
'Anoche (domingo) llamé a la Policía de Infancia y Adolescencia, a la Policía Nacional, y me cansé, porque no contestaron. Nosotros estuvimos haciéndole seguimiento por medio de un conocido que fue invitado a la fiesta y sabemos que a la 1:00 de la mañana seguían allá, pero no daban la dirección exacta para que no les echaran a la Policía', explicó a EL HERALDO una ciudadana que conoció el caso y que prefirió que su identidad no fuera publicada.
Este medio se comunicó con la oficina de prensa de la Policía Metropolitana de Barranquilla y con uniformados del grupo de Infancia y Adolescencia para indagar si como autoridad tenían conocimiento de la 'covid-tk', pero no dieron claridad sobre ello.