Al cumplirse el primer mes de la tragedia de Tasajera lo que se conoce por el momento es el acompañamiento integral que la Alcaldía de Puebloviejo y la Gobernación del Magdalena harán a las familias de las víctimas.
Se indicó que esta ayuda es de tipo sicológico y social al igual que de generación de ingresos, debido a que la mayoría de los muertos eran hombres cabezas de hogar.
El propósito es buscarles la forma de que mejoren en su calidad de vida.
Aunque los sobrevivientes reconocieron que fueron responsables de su mala suerte, manifestaron que el siniestro sirvió para desnudar –una vez más– la miseria en la que ellos viven, por lo que acudieron a la sensibilidad del Estado en sus diferentes manifestaciones.
Recientemente se hizo público un debate de control político al Gobierno nacional promovido por el senador Efraín Cepeda.
El congresista conservador quiere saber qué está haciendo el Estado por la sostenibilidad de la Ciénaga Grande de Santa Marta, que, a juicio de las familias de las víctimas de Tasajera, el deterioro del hábitat comenzó por las obras de la Troncal del Caribe con perjuicio para su economía.
El alcalde de Puebloviejo, Fabián Obispo, anunció que propugnará por llevar a cabo un proceso legal encaminado a lograr una indemnización por parte de la Nación como responsable del golpe a la economía que ocasionó la construcción hace más de 50 años de la vía a Barranquilla.
'Quienes se llevan los recursos son el consorcio y las grandes empresas', indicó el mandatario.
Hace días la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca –AUNAP– entregó un muelle flotante para facilitar las labores de descargue de faena a los pescadores de Tasajera.
Este artefacto naval fue adjudicado a la Asociación de Organizaciones Comunitarias de la Ciénaga Grande de Santa Marta –Asocociénaga– para favorecimiento de todos los pescadores que subsisten de lo que les brinda la naturaleza en ese espejo de agua dulce.
Fue instalado en el mercado público de Tasajera, con el aval de la Alcaldía local y con todos los permisos por parte de la Dirección General Marítima y Portuaria, DIMAR, contando así con la matrícula y ubicación autorizada.
Este permite descargar el pescado en mejores condiciones de seguridad y salubridad.
