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Gran indignación ha causado en Soledad la agresión a dos agentes de tránsito por parte de un ciudadano al que le inmovilizaron un motocarro; sobre todo desde que el Instituto Municipal de Tránsito reveló que ambos se encuentran en delicadas condiciones de salud.

Por tal motivo, la Policía Metropolitana de Barranquilla se pronunció haciendo un llamado al respeto a las autoridades por parte de la ciudadanía, asegurando que este tipo de intolerancias 'no tienen cabida en estos momentos'.

'Este acto de intolerancia cometido por el ciudadano causó que un funcionario tuviera heridas de consideración que lo tienen en estos momentos en una clínica de la ciudad (…) Es importante señalarle a la comunidad que actos de intolerancia contra la autoridad, sea Policía, Secretaría de Tránsito o cualquier funcionario público, no vienen a lugar cuando somos consientes de que los funcionarios cumplen con la ley', indicó el coronel Oleskyenio Flórez, comandante Operativo de Seguridad Ciudadana de la Mebar.

Así mismo, invitó a los ciudadanos a 'respetar los procedimientos y sobretodo acudir a las instancias que están establecidas, si hubiera algún tipo de queja por la actuación de los funcionarios', refiriéndose al hecho de que la agresión de este lunes se registró luego de un procedimiento de control por parte de los funcionarios de Tránsito, en acompañamiento de la Policía, en Soledad.

'La intolerancia es uno de los motores de la violencia y tenemos que pararla a través de la educación ciudadana', agregó el coronel.

Según confirmaron las autoridades, las víctimas de la agresión registrada poco antes del mediodía de este lunes fueron el guarda de Tránsito Flavio Mendoza Baca, de 54 años, quien recibió lesiones con arma blanca en el hombro y en el abdomen, por lo que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en la Clínica Campbell. Por su parte, el agente Alfonso Pérez fue puesto en observación médica en el mismo centro asistencial debido a una herida en región toracoabdominal.

De acuerdo a lo informado previamente por este medio, la cuestionable agresión contra los funcionarios ocurrió en la bomba La Estrella, ubicada en la calle 63 con carrera 16, perteneciente al barrio Villa Murillo de Soledad. Hasta allí habían llegado los agentes de Tránsito para tanquear la motocicleta en la que se movilizaba, cuando de repente fueron atacados por Franklin Rafael Buzón Jiménez, de 27 años, quien presuntamente se encontraba en compañía de su padre.

Si bien el señalado agresor trató de fugarse, en una rápida y oportuna reacción por parte de las autoridades, fue capturado y dejado a disposición de la Fiscalía, que lo presentó ante un juez con funciones de control de garantías y le imputó el delito de homicidio en grado de tentativa, según informó la Policía.