Silvia Padilla Zárate, presidenta de la Lonja de Propiedad Horizontal, aseguró que los problemas de convivencia se han convertido en una constante en los edificios de Barranquilla debido a que no se cuenta con las herramientas necesarias para atender estas situaciones con 'celeridad y eficacia'.
Para Zárate, el episodio que se presentó en el Condominio La Ría es la 'crónica de una problemática anunciada' y que se puede evidenciar en cualquier sector de la capital del Atlántico.
'No hay herramientas específicas para la propiedad horizontal y la situación se nos ha salido de las manos', agregó.
La líder de la agremiación fue enfática al sostener que se debe recurrir a la conciliación como mecanismo para la solución de conflictos entre vecinos, pero 'cuando se presenta una situación más grande, toca recurrir a la Policía para que se encargue de la atención del caso'.
Padilla Zárate también expuso que desde el inicio de la cuarentena se ha detectado un 'incremento de la agresividad', lo que se ha reflejado en la recepción de hasta 60 quejas por mes debido a enfrentamientos entre vecinos.
'Se han disparado estas situaciones porque las personas han tenido esos sentimientos reprimidos. Lo cierto es que las fiestas siguen prohibidas y los administradores son los responsables de hacer cumplir estas restricciones, no los porteros y/o vigilantes', agregó.
La presidenta de la Lonja de Propiedad Horizontal indicó que los sectores más críticos son Ciudad Caribe y Alameda del Río, así como Miramar y Villa Tarel, entre otros.
'Es preocupante que en muchos sectores de interés social se ven afectados por la falta de seguridad y eso permite el incumplimiento de protocolos y que se disparen los contagios por Covid', puntualizó.
