En la acera de una casa localizada aproximadamente a cuatro cuadras de la carrera 36 con calle 50, donde detonó la granada que fue lanzada contra tres policías la noche del domingo, investigadores encontraron algunas prendas de vestir que fueron abandonadas por los delincuentes.
Se trata de un buzo blanco, con capucha, que tiene una franja de color gris y otra de color rojo, así como el logo de la marca Adidas. También una gorra blanca con negro que tiene la marca CAT y y casco de color negro con dibujos blancos en los que a medias se lee la placa de una moto que incluía una O, una G, el número 9 y una C.
El general Ricardo Alarcón, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, confirmó el hallazgo de las prendas y afirmó que estas podrían ayudar al desarrollo de la investigación. También precisó que una de las herramientas fundamentales con las que cuenta la institución para dar con la identificación y el paradero de los criminales son las cámaras de seguridad.
Según el oficial, tras el ataque inició un barrio por 15 cuadras a la redonda en busca de los videos de seguridad con los cuales se hará un seguimiento y un análisis que permitirá conocer los movimientos de los sospechosos antes y después de la explosión.
Es así como la persecución dejó de ser física, pero se convirtió en digital y en vez de velocidad, los investigadores utilizan la inteligencia para acercarse cada vez más a los sospechosos.
Este medio conoció que gracias a la colaboración de la comunidad, desde la noche del domingo se han realizado pesquisas en diferentes sectores, incluso se ha identificado a personas que tienen motos similares a la utilizada por los delincuentes: una XTZ de color azul.