La dinámica criminal en el interior del grupo ‘Babados Killa’, con el pasar de los días, ha ido quedando al descubierto. Extorsión, intercambio de contenido sexual y hasta venta de estos materiales es lo que han denunciado las víctimas, y que confirmaron hombres que hicieron parte de este accionar que colocó en jaque la intimidad de, al menos, 25 mujeres en Atlántico y Barranquilla.
Uno de los integrantes de este grupo accedió a contarle a EL HERALDO detalle a detalle la forma en la que se movía el contenido sexual en el interior de este chat que fue creado en la aplicación de mensajería llamada Telegram, sin el consentimiento de las mujeres que figuraban en las filmaciones o fotografías. Fue un joven de 26 años quien confirmó todo lo que las mujeres denunciaban en sus redes sociales.
'Yo ingresé a ese grupo porque varios amigos me dijeron que ingresara porque estaban compartiendo material bueno de chicas, cuando yo ingresé vi que eran videos pornográficos que se consiguen en cualquier página para adultos, pero llegó un punto en el que comenzaron a boletear a las mujeres del común, es decir, que si yo tenía una novia y ahora no somos nada yo podía mandar sus fotos íntimas para crear comentarios de todas las personas que en la mayoría eran hombres', detalló.
El joven, bajo el anonimato, sostuvo que por sus labores diarias solo ingresaba al grupo ‘Babados Killa’ en las noches cuando sus horarios se lo permitían.