Nuevos detalles se conocieron tras la noticia del crimen del propietario del estadero Donde Argel, José Alfredo Noriega Hernández, conocido como ‘el Negro Argel’. Según la Policía y un sobrino de la víctima, una de las personas vinculadas al homicidio es una empleada que se ganó la confianza del hombre de 61 años, quien terminó contratándola para hacer oficios varios en la vivienda.
Según David Alfonso Perales Noriega, sobrino de ‘el Negro Argel’, hacia las tres de la madrugada de este martes, la mujer le abrió la puerta de la casa a su hermano para que ingresara a cometer el hurto.
'Él entra sin arma. Mi tío estaba acostado y ese hombre le ató lo brazos. En la búsqueda de joyas y elementos, encontró un revólver. Mi tío, al resistirse, este hombre le pegó con el mismo revólver', aseguró el familiar.
La muerte de Noriega Hernández se produjo de manera inmediata. Y así, rápidamente, los responsables del homicidio salieron de la casa. El hijo de la víctima, un adolescente de 17 años que se convirtió en testigo de todo, también fue maniatado y encerrado en su cuarto mientras todo pasaba.
Cuando notó silencio en la casa, el menor logró zafarse de las cuerdas y corrió a la casa de un vecino. 'Ese vecino se acerca a la casa, suelta con unas tijeras a mi tío, trata de hablarle, pero ya había fallecido', explicó el sobrino de la víctima.