José Alfredo Noriega Hernández le abrió las puertas de su casa a la muerte. Primero le brindó su confianza a una mujer que trabajó de mesera en su estadero de razón social Donde Argel y a quien luego la llevó a su casa para que también laborara ahí haciendo oficios varios. A raíz del buen trabajo que hizo ella, ‘el Negro Argel’, como era conocido Noriega Hernández, contrató al hermano de esta, quien también laboró en el establecimiento comercial, pero como cantinero. Sin embargo, estas dos personas son las principales sospechosas de haberle causado la muerte a su jefe la madrugada de este miércoles.
'Yo a ese muchacho (presunto homicida) lo conocí por José, ya que él lo metió a trabajar por ser el hermano de esa muchacha. Él trabajó en la barra y duró como tres o cuatro meses', señaló Argel Junior Noriega, hermano mayor de la víctima, quien también explicó que años atrás ‘el Negro Argel’ había conocido a la mujer en otro estadero ubicado en el Centro de la ciudad.
El pariente indicó que la llegada del presunto victimario al negocio de José Alfredo, quien tenía 61 años, se dio luego de que flexibilizaran las medidas por la covid-19. 'A ese muchacho no se le notaba nada extraño, era un pelao normal', enfatizó.
