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Por:  Brandon Esparragoza

Poco a poco fueron desarmando una antena de telefonía celular para que dejara de funcionar y comenzar a extorsionar a la empresa propietaria de esta. Sin embargo, los presuntos autores de este actuar delictivo fueron capturados, así lo anunció este sábado la Policía Metropolitana de Barranquilla.

De acuerdo con las investigaciones llevadas por la institución armada y la Fiscalía General de la Nación, los detenidos, aparte de exigir la suma de 30 millones de pesos para permitir que la estructura metálica funcionara, le quitaron los candados de seguridad de ingreso al lugar donde está la antena para ponerle otros y así obligar a la empresa, ubicada en el barrio El Ferry, a pagar el dinero ilícito.