'Era un niño muy juicioso, no salía de la casa, no tenía problemas con nadie, era muy querido, no era callejero, no tenía vicios y ni tomaba', fueron las palabras de los parientes de Jorge Luis Mejía Benítez, el joven de 19 años que murió a raíz de un proyectil de arma de fuego que lo alcanzó cuando estaba cerrando la reja de su casa.
De acuerdo con Ledys Benítez, la madre de Jorge Luis, el ataque a bala iba dirigido para un grupo de personas que se encontraba frente a su vivienda, ubicada en la calle 112 E con carrera 13, barrio Los Ángeles I, de Barranquilla. Fue en la noche de este domingo.
'Un amigo lo buscó para comer pizza. Luego ya se regresaron, pero él (Jorge Luis) se quedó hablando con el amigo en la terraza de su casa, a dos casas de la de nosotros. Después, el amigo le dijo que ya se tenía que ir a dormir y es cuando Jorge vino de regreso', dijo la progenitora.
En ese momento, según el relato de Benítez, pasaron dos sujetos a pie 'haciendo disparos a un grupo de muchachos'.
