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La ola de inseguridad que se registra en Barranquilla y su área metropolitana, a criterio de dos expertos consultados por EL HERALDO, tiene sus orígenes en 'la descomposición del tejido social' que se ha dado en los últimos años en la capital del Atlántico, y a la reciente reactivación económica.

Pero son los atracos, en todas sus modalidades, los que han activado las alarmas, al punto de que el propio alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, reclamó de todas las instituciones involucradas 'mayor articulación y efectividad' para enfrentar este y otros delitos.

Para el abogado penalista, expersonero de Barranquilla y experto en seguridad Arturo García Medrano, en los últimos cinco años, la dinámica criminal en la ciudad da cuenta de que cada tres meses se registra 'un pico alto' con los temas relacionados con la seguridad, lo que ha obligado una intervención de alto nivel.

Es por ello, destaca el analista citando al alcalde Pumarejo, que en Barranquilla se han implementado una serie de estrategias que en el fondo 'han sido inferiores al propio desafío'.

'El alcalde debe tener en cuenta que la violencia urbana tiene sus orígenes en la cotidianidad de las comunidades. Quienes hoy delinquen nacieron y crecieron en esa comunidad que está permeada por las bandas y subestructura que ejercen algún tipo de criminalidad en los sectores', expone García.

El expersonero de Barranquilla destaca que hay factores que permiten analizar la situación. 'No podemos echarle la culpa a los migrantes, esta realidad está con nosotros desde mucho antes. La época de la bonanza marimbera trastocó la sociedad, la familia y hasta la cultura. Eso es algo que deben entender las autoridades'.

Es por eso que el anunció de más componente humano (Policías) y el tener herramientas tecnológicas, dice el analista, 'no será la solución para enfrentar esta situación'. 'Debemos buscar un análisis verdadero y fortalecer las labores de inteligencia y que esta actúe de la mano con las denuncias que realice la ciudadanía', argumenta García.

Ante ese escenario, el analista propone que la Policía contemple, dentro de sus grupos de reacción, un grupo que se desplace junto con los investigadores para que puedan tomar en el sitio del hecho la denuncia y así facilitar el proceso para la víctima.