Un vigilante informal muerto y dos conductores gravemente heridos es el saldo de un ataque criminal que ocurrió en el barrio San Roque, suroriente de Barranquilla.
Tras el atentado, un equipo periodístico llegó hasta la zona para conocer más detalles de lo ocurrido, pues el domingo 24 de octubre un domiciliario también fue baleado en ese mismo punto por un sicario.
Varias personas que frecuentan la zona aseguraron que todo obedecería al no pago de una extorsión a bandas criminales que operan en la zona. Por temor, los testigos no se atreven a mencionar el nombre exacto de la banda, solo dicen: 'Son los de siempre'.
'El muerto solo tenía un día trabajando como vigilante del billar que hay acá y mire cómo lo mataron sin tener nada que ver con lo que de verdad ocurre. El anterior vigilante del lugar le tocó irse porque lo amenazaron y antes que lo mataran se desapareció', dijo el hombre bajo el anonimato.