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Jacqueline De la Rosa aseguró que su sentir de madre le habló en más de una ocasión, aun cuando su hijo mayor le decía que todo estaba bien.

Hoy, a las afueras de Medicina Legal en Barranquilla se aferró a ese también llamado sexto sentido que solo suelen tener las progenitoras para hablar sobre el asesinato de Michely Antonio Padilla De la Rosa, de 30 años, su primogénito.

'Yo estaba en mi casa a eso de las cinco de la tarde cuando llegó el tío de él y me dijo que me fuera a ese lugar porque me habían matado a mi hijo', contó la mamá de la víctima mortal.