Los pistoleros que lo acribillaron le hicieron creer que eran simples pasajeros. Al parecer, lo llevaron hasta una trocha del barrio Brisas del Río, de Malambo, lo bajaron de la moto, le quitaron sus pertenencias y en ese momento se originó el forcejeo.
Luego, los dos delincuentes le dispararon en la mano y no bastando con ello le propinaron dos impactos de bala en la cabeza. Hurtaron la motocicleta del hombre y en ella huyeron, mientras que él, identificado como Jonathan Alfonso Pérez Jiménez, de 33 años, quedó malherido en el suelo.
Moradores de la zona lo auxiliaron y lo llevaron a un centro médico del que fue remitido a otro donde terminaron por confirmar su deceso.
Ante el hecho, ocurrido en la noche de este miércoles a eso de las 7:45 p. m. exactamente en la carrera 1A3 con calle 22 de la mencionada población, EL HERALDO dialogó con Jorge Andrés Pérez Molina, padre de la víctima mortal, quien contó detalles del caso.
'Él estaba en una bomba y fue a hacer una carrera, dejando ahí a unos compañeros suyos. De pronto llegaron dos muchachos para que les hicieran la carrera y los transportaran hasta Brisas del Rio, pero los otros mototaxistas dijeron que no, que a esa hora no iban para allá', contó.
Minutos después su hijo regresó y accedió a llevar a los desconocidos, sin pensar que ese sería un viaje sin retorno: 'Jonathan regresó y encontró a los muchachos. Ellos como que hablaron y los embarcó. Por allá por Brisas del rio lo pararon, le quitaron la moto y todo lo que llevaba y después me lo mataron'.
Una vecina dio aviso a la familia de Pérez Jiménez de lo que había sucedido. 'La misma comunidad lo auxilió y lo embarcó en un motocarro, pero ya iba mal'.
El padre de la víctima mortal dio a conocer que 'Jonathan era un muchacho de bien, muy humanitario (...) no sé por qué le quitaron la vida, y de la forma en la que pasó, con el primer tiro en la mano estaba bien, si le iban a quitar la moto no tenían que haberle disparado en la cabeza'.
Asimismo, el familiar del asesinado sostuvo que 'las autoridades nos dijeron que fuéramos a la bomba porque allí hay cámaras, mis familiares cogieron para allá para que les muestren los videos'.
De la víctima mortal se conoció que tenía 10 años trabajando como mototaxista en el municipio de Malambo, que vivía con su abuela en el barrio Villa Esther y que dejó una hija de 10 años.
Finalmente el allegado de Pérez Jiménez pidió justicia por este crimen: 'A la Policía, que la muerte del hijo mío no quede impune'.