Compartir:

Vecinos del barrio Miramar, en el norte de Barranquilla, aún recuerdan el sonido de las sirenas y las luces azules y rojas de las balizas atornilladas en las patrullas de Policía que en la noche del martes 28 de agosto de 2018 llegaron hasta un sector enmontado de la zona —lugar por donde hoy pasa una carretera que une con la avenida Circunvalar— adonde fue hallado el cuerpo sin vida de Brenda Pájaro Bruno, una ama de casa que había sido reportada como desaparecida desde el 25 de julio del mismo año.