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El atentado armado registrado en la tarde del pasado viernes 10 de mayo, en la calle 47 con carrera 4 Sur, sector de la Ciudadela 20 de Julio, termino siendo una masacre luego de que este 17 de mayo se confirmara el deceso de Camilo José Miranda Jiménez, persona que también había resultado herida.

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El barbero de solo 21 años falleció, en la mañana de este viernes, en las instalaciones de la Clínica Santa Ana, a causa de un fuerte impacto de bala en su columna.

Miranda Jiménez, aparentemente, según los reportes de las autoridades, no tenía nada que ver con el acto sicarial que tuvo lugar en el sitio mencionado. Sin embargo, su poca distancia al lugar de los hechos provocó que fuese foco de un disparo en su humanidad.

De hecho, no registraba anotaciones judiciales en el Sistema Penal Oral Acusatorio, Spoa.

Este atentado a bala ya había sumado dos víctimas fatales identificadas preliminarmente como Leonardo Martínez Gaitán, de 28 años, y Laura Angélica Casanova Vides, de 30 años. Ambos fallecieron inmediatamente en el lugar de los hechos.

Los mencionados se encontraban sobre la calle 47 cuando fueron abordados por dos sujetos armados movilizados en una motocicleta, quienes empezaron a disparar contra ellos sin mediar palabras. Esos fueron los detalles entregados por la Policía.

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Leonardo, natal de Santa Marta y tatuador, registró tres impactos de bala. Contaba con tres anotaciones judiciales en el Sistema Spoa, dos de ellas por el delito de hurto. Todo según datos que pudo conocer este medio.

Además, esta persona tenía menos de una semana de haber llegado a territorio colombiano, puesto que se encontraba en Ecuador.

A su vez, Laura Angélica se ganaba la vida como enfermera. Dos fuertes heridas en el cuello no le permitieron mantenerse con vida.

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Las autoridades todavía intentan determinar los móviles de este asesinato. No se han descartado las hipótesis de un presunto ajuste de cuentas o un homicidio producto de la supuesta disputa territorial por las rentas criminales entre ‘Costeños’ y ‘Pepes’.

Investigadores cercanos a las pesquisas lograron determinar que, al parecer, había una presunta amenaza, por medio de panfletos, hacia una de las personas fallecidas por parte de la estructura delincuencial ‘Los Costeños’.