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El pasado miércoles 11 de septiembre tomó posesión en el céntrico municipio de Sabanalarga el nuevo comandante de la Policía del Atlántico, coronel John Harvey Peña Riveros, un oficial de 52 años de edad y 30 de esos portando el uniforme de la institución armada.

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Después de unos días de tanteo del terreno, en específico los 18 municipios que hacen parte de la jurisdicción de vigilancia de la Policía del Departamento, el oficial reiteró su posición frente a la lucha contra la extorsión, el homicidio y la violencia de género, delitos citados en su discurso de posesión y que, como todos los saben, le han quitado la tranquilidad a los atlanticenses.

En el tema de homicidios, el Departamento ha experimentado este 2024 un aumento del 58,3 %, pasando de 50 casos, en 2023, a 57 casos.

Los municipios más afectados incluyen Sabanalarga, Baranoa y Sabanagrande, donde las cifras de homicidios han superado las del año anterior. Principalmente, los homicidios se perpetran con armas de fuego, y se ha registrado un notable aumento en la violencia de género, con 11 muertes de mujeres hasta la fecha, comparado con solo dos el año pasado.

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“La mayoría de los homicidios son cometidos con armas de fuego. Además, se ha notado un cambio en los patrones temporales de los crímenes, con picos en las horas de la tarde y noche. A pesar de las preocupaciones sobre el sicariato y otros delitos, el departamento ha logrado mantener un promedio de seis homicidios por mes, lo que se considera positivo en el contexto nacional. Por eso se planean estrategias para abordar estos problemas de manera más eficaz”, sostuvo Peña.

En ese sentido, de acuerdo con el oficial, se empezó a usar una “estrategia metodológica” en la que se caracteriza el delito en los 18 municipios bajo su vigilancia.

“Se le ha pedido a todos los comandantes de los municipios identificar a los actores criminales que afectan la seguridad para empezar una labor judicial contra todos estos. Todos los municipios son priorizados”, afirmó.

Propuesta

Pero, aparte de las estrategias operacionales propias de la fuerza pública, Peña también hizo énfasis en una estrategia con la que se pretende quitarle los jóvenes a la delincuencia, pues, según perspectiva, cada día es más común ver jóvenes metidos en estructuras criminales locales como ‘los Costeños’, ‘Pepes’, ‘Rastrojos-Costeños’ o el mismo ‘Clan del Golfo’.

En visita a EL HERALDO, el nuevo comandante dio un breve repaso de su recorrido dentro de la institución, tanto en la parte operativa y el área administrativa, pero explicó de qué se trata esa opción para construir con las autoridades civiles y que busca reducir índices de criminalidad en los municipios que tiene bajo vigilancia.

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“Yo creo que hay que buscar alternativas para los jóvenes, sacarlos de los billares, quitárselos a la delincuencia. Por eso buscamos llevar una oferta institucional a los municipios. Si los muchachos quieren entrar a la Policía, se hace la diligencia; si quieren pertenecer al Ejército, se vinculan; a la Fuerza Aérea, a la Armada. Eso sería una buena oportunidad para los muchachos”, expresó el oficial.

Aparte, el coronel Peña insiste que en esa búsqueda de alternativas para los jóvenes, para sacarlos de los entornos criminales como la venta de estupefaciente, se plantea “construir una cartilla cultural, turística, gastronómica y deportiva”, con el apoyo de la Gobernación del Atlántico, para que habitantes de esas 18 poblaciones se vinculen como guías de turismo.

“Acá lo que se necesita es buscar una ocupación a los jóvenes, mantenerlos apartados de la delincuencia para que no se les sumen”, insistió.