Los Villalba Marín atraviesan uno de los peores momentos que han vivido como familia, luego de que el pasado 25 de diciembre del 2024 un conductor en aparente estado de embriaguez atropellara a la líder social Tomasa Dolores Marín de Villalba, de 68 años de edad, y su nieta, Erianis Villalba Marín, de tan solo 5 años.
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El siniestro vial tuvo lugar en la vía Oriental, a la altura de Malambo: la adulta mayor falleció de manera instantánea en el lugar de los hechos, mientras que su nieta, yacía inconsciente en el asfalto caliente por el contundente golpe que recibieron.
Inicialmente la menor fue trasladada a la Clínica Campbell de Malambo, pero, por los fuertes golpes que recibió, la remitieron al Hospital Niño Jesús. Pero ocho días después de estar batallando por su vida, la menor acabó falleciendo por un infarto luego de entrar en una crisis que no pudo ser tratada por los doctores.
Sobre el caso, de acuerdo con los testigos que se encontraban en el lugar, las dos víctimas habían descendido de un bus, y se disponían a cruzar la calzada, cuando fueron embestidas por un vehículo marca Chevrolet, color negro, de placas KMU-157, conducido por un hombre identificado como David Ariza, nombre que apenas se conoce.
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Presuntamente, el sujeto intentó darse a la fuga en el mismo vehículo. Sin embargo, unos moto taxistas que se encontraban por el sector lograron alcanzarlo y lo retuvieron, hasta que uniformados de Policía del municipio de Malambo llegaron al lugar a detenerlo.
No obstante, el hombre fue liberado por las autoridades pasados unos minutos, luego de que los agentes del tránsito municipal no estuvieran capacitados para manipular equipos de alcoholimetría.
Voces de las víctimas
EL HERALDO se trasladó hasta la vivienda donde vivía Tomasa Dolores Marín De Villalba, en Bellavista de Malambo.
Jimmy Villalba, hijo de la adulta mayor, con una tristeza profunda, volvió a insistir en la labor desinteresada de su madre para con los que le pedían ayuda.
“Mi madre era una líder social del municipio de Malambo, la cual tenía que ver con todas las personas más necesitadas de aquí alrededor de este sector, la cual recogía juguetes para regalar en Navidad, recogía ropa usada para los niños más necesitados de aquí. Recogía alimentos, regalaba alimentos, ella hacía comida de más en su casa y la regalaba a los niños más necesitados, porque ella era una líder que amaba mucho a los niños”, afirmó.
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Reveló que la niña Erianis Villalba estaba bajo el cuidado de su abuela Tomasa Marín, ya que su hermano se había divorciado de su mujer, y en un intento de ayudarle, le pidió que le dejara a cargo a la menor.
“Se puede decir que estaba a la custodia de su abuela, pero la mamá intervenía, la venía a buscar y todas esas cosas. Prácticamente mi mamá estaba pendiente de ella y de todas sus cositas, porque esa era la luz de sus ojos, su nieta, que era como su hija”, afirmó Jimmy Villalba.
Además reiteró que hubo muchas irregularidades por parte de las autoridades, denunciando que al momento de enterarse del accidente, se dirigió hasta el lugar de los hechos para encontrarse con la sorpresa de que el sujeto que había embestido a su madre y a su sobrina lo habían dejado libre.
Sin embargo, el secretario de Tránsito del municipio de Malambo, Sergio Donado, le había informado a esta casa Editorial que, el joven que conducía el vehículo Chevrolet Spark GT, de color negro, fue conducido por miembros de la Policía Metropolitana y luego puesto a disposición de la Seccional Atlántico de la Fiscalía.
“Nosotros (Tránsito) no tenemos facultad para detener. Él estaba a disposición de la Policía Nacional y luego se puso a disposición de la Fiscalía. Nosotros hacemos lo propio, lo que es remitir todas las pruebas técnicas a la Fiscalía, para la investigación”, afirmó Donado.
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No obstante, el secretario de Tránsito de Malambo reconoció una falla durante el procedimiento, y era que los agentes reguladores no le practicaron la prueba de alcoholimetría al joven que estuvo involucrado en el siniestro por “falta de capacitación”.
“Tenemos los alcohosensores disponibles, pero no se puede no se pueden usar hasta que la persona no esté capacitada”, manifestó el secretario.
Por otro lado, desde Medicina Legal, el padre de la menor e hijo de Tomasa Marín, Erick Enrique Villalba Marín, narró entre lágrimas y llanto los terribles momentos que vivió durante los ocho días que estuvo su hija internada hasta su fallecimiento, el jueves 2 de enero, en el Hospital Niño Jesús.
“Mi hija, una niña inocente que estaba viviendo su vida, excelente alumna, porque pueden ver el reporte del colegio, como era de buena alumna mi hija excelente niña, iba muy bien en su colegio, era una niña muy linda, muy querida por la comunidad ustedes pueden ir por la casa y ver la comunidad como está adolorida, como me acompaña a mí en mi dolor”, expresó el padre.
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Aunque el reporte de los médicos no era el más optimista, Erick Villalba siempre se aferró a la idea de que su hija se iba a recuperar del trágico accidente, incluso manifestó que los médicos iban a tratar de salvar su vida hasta las últimas instancias.
Los familiares y amigos de las dos víctimas fatales exigen a las autoridades que este caso no quede impune. Los Villalba comunicaron que están siendo asesorados por un abogado que los representará como víctimas ante un eventual proceso judicial contra el supuesto infractor.
