Yery Rocha Nigro, padre de la patrullera soledeña adscrita a la Policía de Sucre, Kelly Rocha Rago, pide a los altos mandos de la institución armada y al ministerio público que esclarezcan las circunstancias en que falleció su hija, porque no cree que se haya suicidado.
A las 6 de la mañana del pasado viernes 19 de septiembre, la joven de 23 años fue hallada muerta en su dormitorio de la Estación de Policía de Majagual y, según otros uniformados que laboran el lugar, usó su arma de dotación Sig Sauer 9 milímetros para quitarse la vida. El balazo le entró por la boca y le salió por el lado izquierdo del cuello, de acuerdo a lo que informaron testigos a la unidad de levantamiento de cadáveres del CTI de la Fiscalía que realizó la diligencia.
Posterior al hecho, el coronel Carlos Alberto Wilches Goyeneche, comandante de la Policía en Sucre, aseguró a los medios de comunicación que la muerte de la patrullera, quien se desempeñaba como secretaria de la Estación de Policía, obedeció a un suicidio.
Esta versión no es del todo clara para el padre de la joven pues argumenta que hacen falta muchos cabos por atar en torno al caso.
Visiblemente afectado por la repentina desaparición de su hija, Yery expresa que lo primero que las autoridades deben aclarar es la forma cómo perdió la vida.
Ayer, el hombre estaba rodeado de sus familiares en la funeraria La Ascensión, en el norte de Barranquilla. En la segunda sala del recinto, se acercaba una y otra vez al féretro de su hija. Lo abría, miraba de arriba abajo el cuerpo sin vida de la joven, el cual estaba vestido con el uniforme de gala verde olivo de la institución. Luego repetía: 'a mi hija le pasó otra cosa, mi hija no se suicidó'.
Al padre le dicen que ella se disparó con la mano izquierda, versión que cree absurda porque, según él, esta era la mano en la que la patrullera tenía menos habilidad, menos fuerza. Esto lo complementa con la idea de que Kelly no tenía las 'agallas' para 'tomar un arma de fuego, ponérsela en la cabeza y dispararse'.
Al tiempo, señala que el cuerpo de su hija, además de la herida que le causó el proyectil, tiene una lesión en los dedos de la mano derecha, hematomas en el rostro y en las piernas, los que para él pudieron haber sido ocasionados por otra persona.
Kelly Rocha Rago en una foto de Facebook.
Mensajes que conserva su novio sugieren una posible presión laboral, aunque la familia sostiene que había también hostigamiento sexual.
Otra de las dudas de Yery radica en que esa mañana de viernes nadie de la estación se dio cuenta del caso o escuchó el disparo, e indica que quien encontró a Kelly fue la aseadora del lugar y no los compañeros de servicio. Esto, a pesar de que ocurrió a las 6, se lo notificaron a la familia Rocha cuatro horas después.
'Los policías dicen que ella se suicidó. Pero Kelly nunca tuvo depresiones, tendencias o pensamientos suicidas. Mi hija no tenía ese tipo de problemas, los problemas en realidad los tenía en esa estación de Policía, en la que la acosaban laboral y sexualmente'.
Después de la revelación, el padre cuenta que desde que ella llegó a la estación de Majagual pasó momentos difíciles debido a la mala atmósfera laboral en el sitio, que era propiciada por un teniente de apellido Cáceres. Este, según Rocha, la obligó a mantener un cargo de secretaria cuando, al parecer, la joven no tenía mucho conocimiento en el manejo de computadores ni de labores de oficina. Ese mismo oficial, según él, sería quien también la acosaba sexualmente.
'Nosotros queremos que esta situación llegue hasta lo último, que el general Palomino (director nacional de la Policía) se entere y se pronuncie frente al caso. Ella le decía al jefe que no sabía de computadores y, sin embargo, este la obligaba a estar como secretaria'. (Antes de morir, patrullera avisó que teniente la acosaba)