La Contraloría General de la República ainició una Actuación Especial de Vigilancia y Control Fiscal sobre la gestión de entidades como el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, la Corporación Autónoma Regional de la Guajira (Corpoguajira) y los gobiernos departamental y municipal frente a las consecuencias derivadas de la sequía en la Guajira, ante la inacción estatal.
El ente de control recibió una denuncia por parte de la Asociación de Autoridades Autoridades y Cabildos Indígenas Wayuu del Sur de la Guajira sobre la grave crisis ambiental y humanitaria de las comunidades que, dicen, fue corroborada por una comisión de la Contraloría General de la República.
Mediante comunicado de prensa, la entidad que 'la comisión de la Contraloría Delegada para el Medio Ambiente verificó que evidentemente el sur de la Guajira padece una crisis ambiental por el déficit hídrico originado en la intensa sequía que se afronta desde finales del año 2013, por falta de lluvias'.
'Una grave crisis ambiental y humanitaria viven hoy las comunidades indígenas del sur del departamento de la Guajira por la fuerte sequía que afecta a municipios como Distracción, Barrancas y Hatonuevo, sin que siquiera hayan recibido alguna visita por parte de las autoridades ambientales, ni de los Comités de Atención y Prevención de Desastres, ni de la Gobernación, ni de entidad alguna', indica la Contraloría.
Según la entidad, 'el fenómeno de sequía ha ocasionado la muerte de animales, el daño de cultivos de arroz, yuca y plátano, entre otros, y ha puesto en riesgo la salud de las personas, en particular aquellas en condición de mayor vulnerabilidad, como son los niños y adultos mayores, en este caso, de las comunidades indígenas'.
Los funcionarios de la CGR que realizaron esta inspección hicieron un informe que detalla, con varias fotos, el evidente estado crítico de las comunidades por el déficit de agua en las fuentes hídricas abastecedoras (nacederos, arroyos, pozos y reservorios), tanto para el consumo de las comunidades como para sus cultivos y semovientes.
Según este informe: 'Obras inconclusas o mal diseñadas (jagüeyes, reservorios, micro-acueductos, unidades sanitarias), inadecuada operación y mantenimiento (pozos profundos, molinos de extracción), aunado al déficit de lluvias desde hace ya cerca de diez meses han dado como resultado una crisis ambiental y humanitaria en la región'.
Para la CGR, 'la inacción de las entidades, tanto locales como regionales y nacionales, y su lentísima capacidad de reacción y respuesta frente a las situaciones de crisis es evidente, las acciones son reactivas y tardías frente a condiciones que se prolongan en el tiempo, como el déficit de lluvias, que cumple diez meses, en esta región'.