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Una mujer wayuu se encuentra luchando por su vida en La Guajira, ya que necesita un examen especializado para que le realicen un trasplante de riñón y afirma que su EPS no lo autoriza, mientras su salud se va deteriorando cada día más.

Gretty Ramírez Boscán, trabajdora social de 43 años, afirma que hace seis años dio a luz y perdió a su bebé, noticia que recibió mientras estaba conectada a las máquinas de una unidad de cuidados intensivos. Desde ese momento, su sistema renal comenzó a fallar y le fue diagnosticada una insuficiencia renal. 'Fue allí cuando comenzó mi lucha y cambió por completo mi vida', manifiesta entre lágrimas mientras graba un video en el que describe el drama que está pasando.

Actualmente Gretty tiene que ser sometida a cuatro diálisis diarias y a numerosos exámenes, que se llevan a cabo en Barranquilla, a donde tiene que viajar constantemente desde Maicao, donde vive con su familia.

En abril del 2014 salió favorecida para recibir donación y trasplante de riñón, la única posibilidad que tiene de seguir viviendo, pero relata que después de varios viajes a la ciudad de Medellín, donde se llevaría a cabo la operación, en agosto del 2015, le informaron que esta debía ser suspendida porque su sangre podría estar contaminada y requería de unos exámenes especiales.

'El examen que necesito es Punción de linfocele pélvico guiado por ecografía, pero no ha sido posible que me lo hagan, ya que La Nueva EPS, tienen un solo jueguito, un día me mandan para una clínica, el otro para un laboratorio, después para donde otro médico y así se la han pasado para que me hagan el bendito examen y nada', explica.

Agrega que el examen tiene un costo de $3.000.000 y se lo dejan en $1.500.000, los cuales no tiene porque desde que se enfermó no ha podido trabajar. 'El tema incluso no es el dinero, porque mis familiares podrían conseguirlos, pero temo que la EPS se desentienda del resto del proceso por haber asumido de manera independiente el examen y de esta manera entorpezcan el trasplante', indica.

Dice que su paciencia se agotó y también la de su madre Gloria Boscán, quien la acompaña y la cuida desde que se enfermó de los riñones.

'Nos encontramos desesperados, andamos por toda Barranquilla con una mochila llena de documentos que es lo único que nos dan y esto no sirve para nada', manifiesta la señora.

Dentro de esos documentos tienen dos fallos de tutelas interpuestas para que le realicen el examen y las que según Gretty tampoco han cumplido.

'Igualmente tuvimos que interponer dos tutelas para que reconocieran que necesito un acompañante permanente, porque no querían asumir', explica Gretty, quien dice que La Nueva EPS ha dejado en evidencia no solo su irresponsabilidad en este caso, sino también la inoperancia del sistema de salud nacional que se queda corto ante este tipo de situaciones.