Comunidades wayuu marcharon este jueves por las calles de Riohacha para expresar su inconformidad por la medida de la Fiscalía de judicializar a los padres de la etnia que dejen morir a sus hijos.
La protesta pacífica, en la que cargaron ataúdes para representar a los 41 infantes que este año han muerto por causas relacionadas con la desnutrición, salió a las ocho de la mañana de los alrededores de la regional del Bienestar Familiar.
Durante el recorrido llegaron a las sedes de la Contraloría, la Defensoría del Pueblo y la Asamblea departamental, en donde fueron recibidos por algunos diputados que salieron a la vía pública a escuchar sus reclamos.
Luego se trasladaron a la Fiscalía General para rechazaron la judicialización de los padres de los niños que mueran por desnutrición. Este anuncio del organismo investigador se conoció tras los videos divulgados hace dos semanas en las redes que mostraban a dos wayuu sacando a sus hijos enfermos de clínicas y hospitales para que fueran atendidos por medicina tradicional de la etnia.
En la marcha también reclamaron el derecho a tener agua, educación y salud de manera digna. En la Fiscalía se presentó un roce luego que la directora regional Ketty Jurado, anunció la intención de pedir la intervención del Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad.
Finalmente, la funcionaria recibió a cinco líderes wayuu para escuchar sus reclamos.
Afuera, en la puerta de la Gobernación reclamaron la presencia del encargado Jorge Enrique Vélez que no estaba en esos momentos en esta dependencia.
'No se tiene en cuenta la cosmovisión del pueblo wayuu en los puestos de salud existe una barrera lingüística ya que en los centros de salud no se les entienden porque no hablan wayunaniki' expresó Guillermina Epiayú, autoridad tradicional de la comunidad El Ciruelo.
Se quejó porque desde hace veinte días esperan que el gobernador Vélez los atienda. 'A él ni lo conocemos', agregó.
Finalmente, pidieron al presidente Santos que se siente con ellos para fijar una ruta ya que su protesta es para reclamar sus derechos, principalmente, el enfoque diferencial.
'No se tiene en cuenta la cosmovisión del pueblo wayuu, en los puestos de salud existe una barrera lingüística ya que en los centros de salud no se les entienden porque no hablan wayunaniki'. Expresó Guillermina Epiayú, autoridad tradicional de la comunidad El Ciruelo.
Indicó la líder wayuu que 'estamos esperando desde hace 20 días que el Estado se reúna con nosotros, al señor gobernador ni siquiera lo conocemos'.
También dijo que en las rancherías los está matando la sed, 'Nos está matando el agua verde que consumimos, el agua salada y a las autoridades no les da la gana de ir a las comunidades a conocer la situación real en la que vivimos', enfatizó.
Los indígenas piden al Gobierno que se reúna con ellos para poder actuar y establecer una ruta de acción, ya que su protesta es por los derechos –principalmente- de enfoque diferencial.