Por considerar que las mujeres gestantes wayuu de los municipios de Manaure, Riohacha y Uribia, en La Guajira, están en una situación de gravedad y urgencia y que su vida está en riesgo, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, amplió las medidas cautelares que había otorgado a los niños para que se garantice su vida e integridad personal.
Esto en respuesta a una petición hecha por la abogada Carolina Sáchica y el líder wayuu Javier Rojas, quienes consideraron que la vida de unas nueve mil mujeres gestantes wayuu se encuentran en situación de riesgo, debido a la falta de acceso a atención médica en la zona y altos niveles de desnutrición, 'en el marco de una serie de condiciones relacionadas con la falta de alimento y agua en la zona'.
La CIDH solicita al Estado colombiano que adopte las medidas necesarias para garantizar la vida y la integridad de las mujeres gestantes y lactantes wayuu de esas poblaciones, asegurar la disponibilidad, accesibilidad y calidad de los servicios de salud para las mujeres, para que tengan acceso a atención médica, con un enfoque integral y culturalmente adecuado, tomar medidas inmediatas para que tengan acceso al agua potable de manera sostenible y suficiente, tomas medidas para que puedan tener alimentos en calidad y cantidad suficientes para satisfacer las necesidades alimenticias con pertinencia cultural y concertar las medidas con las beneficiarias y sus representantes.
En diciembre del 2016 se cumplió un año desde que la Comisión otorgó medidas cautelares a favor de los niños, niñas y adolescentes de las comunidades de Uribia, Manaure, Riohacha y Maicao del pueblo wayuu, frente a temas que los aquejan como la desnutrición infantil, la falta de agua y el acceso a un buen servicio de salud.
Esto teniendo en cuenta la muerte de niños por desnutrición, cuya cifra el año pasado llegó a 89 y en lo que va corrido del 2017 ya llega a seis menores fallecidos.