Torturado, maniatado y con dos tiros en el cuerpo fue encontrado hacia el mediodía de este sábado el cuerpo de un campesino que fue sacado de la finca en la que trabajaba, por hombres desconocidos que tenían el rostro cubierto con pasamontañas.
La víctima fue identificada por las autoridades como Carlos Mario Rodríguez Brito, de 25 años, quien llevaba algún tiempo prestando sus servicios en la finca Los Marañones, un paraje que se encuentra a regular distancia del corregimiento Cotoprix, sur de Riohacha, área rural que ha venido siendo golpeada por la delincuencia en los últimos meses con atracos y atentados a los trabajadores del campo y los empresarios del agro y la ganadería.
Estaba en la finca con su familia
Lo que pudo trascender de este hecho de sangre es que la víctima se encontraba en la casa principal de la finca, cuando intempestivamente irrumpieron siete sujetos con pasamontañas. Según se indicó, los desconocidos habrían preguntado por el dueño de la finca, quien no se encontraba en el lugar, por lo que al no encontrarlo se llevaron al campesino por una zona enmontada.
Como ya la tarde había caído y existía el temor de salir para no encontrarse con los sujetos que estaban fuertemente armados, lo que hicieron fue resguardarse, mientras que una persona se arriesgó para dar la voz de alerta en la población.
En la mañana de este sábado iniciaron la búsqueda por los alrededores, pero fue solo al filo del mediodía cuando encontraron el cuerpo de Carlos Mario Rodríguez. Estaba con las manos atadas a la espalda y sobre su rostro y parte de la cabeza habían colocado el suéter de color verde y blando que estaba vistiendo cuando lo sacaron de la casa en contra de su voluntad.
Allegados dijeron que había huellas de tortura en su cuerpo y se podían observar dos orificios en la piel que suponía eran las heridas dejadas por un arma de fuego.
