La Organización Médicos sin fronteras inició un proyecto en Riohacha, para atender las necesidades de migrantes venezolanos, colombianos retornados y población sin filiación al sistema de salud, labor que realizan en el Hospital Nuestra Señora de los Remedios.
Los equipos del organismo humanitario, brindan sus servicios de salud sexual y reproductiva en el pabellón de consultas externas del centro asistencial desde el 1 de Abril, incluyendo control pre-natal y post-parto, planificación familiar, atención médica y psicológica para casos de violencia sexual y de género, así como servicios de trabajo social para mujeres gestantes y lactantes.
Una de las venezolanas embarazadas que fue atendida por los médicos de MSF, pero que no quiso revelar su nombre, afirmó que llegó con una fuerte infección porque no había tenido control prenatal en su país.
'Allá no hay cómo parir, no hay medicamentos, no hay ginecólogos y los hospitales están atendiendo a las personas de pie o sentados en una silla, por eso tuve que venirme', manifestó después de la consulta.
Aseguró que tuvo mucho temor porque no se sentía el bebé, pero cuando fue revisada, le dijeron que estaba bien.
Jerifer López Rodríguez, médico de la sala de partos, afirmó que los pacientes llegan sin ningún control previo y por eso se presentan muchas complicaciones tanto para las mamás como para los recién nacidos.
'Muchas mujeres llegan con presión alta, llegan dilatando y tienen varias cesáreas anteriores y algunas han presentado hemorragias postparto. También se registran muchos bebés prematuros que necesitan ser internados en la UCI neonatal', explicó.
