Con tranquilidad y enfocados en sus proyectos productivos, los excombatientes de las Farc del Espacio Territorial de Reincorporación y Capacitación de Pondores , en La Guajira, recibieron la noticia de que algunos de los líderes del ahora partido político decidieron armarse nuevamente.
Contrario a lo que pudiera pensarse no hay incertidumbre, ni miedo con lo que pueda pasar de ahora en adelante y, en cambio, lo que se respira es un ambiente de paz que quisiera tener cualquiera de las regiones convulsionadas del país.
Son unos 200 exguerrilleros los que allí se encuentran y alrededor de 70 niños, muchos de los cuales nacieron después de la firma del Acuerdo de Paz con el gobierno nacional, una razón más que suficiente para no pensar en regresar a las armas.
Juan Carlos Ortiz opina que después de haberse reencontrado con su familia y estar gozando con su esposa y su pequeña hija, no volvería al monte.
'Esa fue la opción que les quedó a ellos por el incumplimiento del gobierno, pero de mi parte no volvería a tomar las armas', aseguró.
Se refiere al grupo de miembros de las Farc liderados por Iván Márquez y Jesús Santrich, quienes anunciaron a través de un video que abandonaban la reincorporación y volverían a rearmarse.
Otro de los excombatientes que se identificó como Gaspar dice que 'cada quien toma su decisión, pero lo que nos toca es seguir adelante, cumpla o no el gobierno, porque de lo contrario sería un retroceso'.
En el ETCR de Pondores se encuentra el líder negociador de las Farc Milton Toncel, conocido como Joaquín Gómez, quien no quiso referirse al tema, aunque se mostró tranquilo y sin mucho afán por el anuncio de varios compañeros que volvieron al camino de la lucha armada.
En el lugar, como de costumbre, había presencia de la Policía, el Ejército y de la ONU, así como de un grupo de capacitadores de varias instituciones que llevan a cabo algunos programas con un grupo de excombatientes en uno de los salones destinados para este fin.
Eder Solano, habitante de Fonseca, municipio al cual pertenece Pondores, afirmó que 'lo que pasó es culpa del gobierno por su incumplimiento con lo firmado, pero aquí seguimos firmes con la paz, porque muchos campesinos han vuelto a sus parcelas y vivimos con mucha tranquilidad, lo que en otros tiempos no se podía'.
Dice que eso se ha visto reflejado en la oferta de productos como frutas y verduras que hay en la población provenientes de la gran despensa agrícola de la Serranía del Perijá.