Cuarenta aulas para centros etnoeducativos de Riohacha están siendo construidas por la Fundación Ancla de Suecia en convenio con la administración distrital a través de la secretaría de Educación, con el objetivo de brindar espacios de aprendizaje confortables y una educación de calidad.
El presidente de la fundación Börje Erdtman explicó durante su visita a esta capital que el objetivo es mejorar la calidad de las personas en las áreas rurales, especialmente comunidades indígenas a través de proyectos, uno de los cuales es la construcción de escuelas, en las que se invierten $500 millones.
'Llevamos cinco años invirtiendo en La Guajira y teniendo como socio estratégico a la alcaldía para la construcción de estas aulas para beneficio de la población indígena', indicó.
Esta iniciativa se lleva a cabo a través del convenio No.163 de 2019, en el que se establece que la administración distrital coloca las bases o placas en un área de 30 o 40 metros y ellos siguen con la construcción de las aulas.
El secretario de Educación distrital Alejandro Ávila aseguró que las comunidades beneficiadas con las de El Patrón, Las Delicias, Jirigiñamana, Vanesa, El ahumao, El Paraíso, Causachon, El Jope, El Arroyo, Cucurumana y Atamana.
'Ellos tienen siete años de estar en la región tiempo durante el cual dijeron que iban a construir cien aulas y ya están logrando el objetivo, aunque piensan cubrir otras necesidades de los niños con la construcción de gimnasios en áreas cubiertas y parques infantiles', explicó.
Erdtman también aseguró que dentro de los proyectos que pretenden implementar en La Guajira, está un método para obtener agua potable del río. 'La idea es que muchas familias puedan beneficiarse con este método, que lo aprendan'.
