La noche del sábado fue asesinado Ramón Segundo Larrada Epiayu, un wayuu de 70 años, cuando se encontraba en la puerta de su casa, ubicada en la calle 27 con carrera 1, barrio Buenos Aires, en Riohacha.
En el hecho, que se registró hacia las nueve de la noche, resultó herido Armando Martínez, de 52 años, quien estaba dialogando con la víctima.
Ramón Larrada es hermano de Tom Larrada Palacios, la autoridad tradicional de la comunidad El Patrón de Riohacha, quien ha recibido amenazas recientemente por apoyar a la lideresa Irama Movil Gámez, que salió ilesa de un atentado que le hicieron en la noche del viernes, y quien es candidata a la representación indígena del Consejo Directivo de Corpoguajra.
'No podemos señalar que el caso tuvo que ver con estas amenazas o problemas personales, no podemos aun hacer señalamientos hasta que las autoridades hagan sus investigaciones', afirmó Tom Larrada, en diálogo con EL HERALDO.
Pidió que se acelere esta investigación, no solo para conocer quién asesinó a su hermano, sino quién o quiénes están detrás de las amenazas en su contra y de otros líderes que apoyan a la lideresa víctima del atentado.
Según la Policía, Larrada Epiayu presentó dos heridas con arma de fuego, una en el abdomen y otra en el tórax, que le propinó un sujeto que iba de parrillero en una moto y que pasó por su casa mientras dialogaba con Martínez.
La inspección técnica del cuerpo fue realizada por el personal del CTI de la Fiscalía seccional La Guajira y su sepultura fue la madrugada de este domingo, según informó su familia.
El líder indígena Tom Larrada Palacios es miembro activo del movimiento indígena Nación Wayuu, el cual se pronunció en un comunicando afirmando que 'las autoridades tradicionales y líderes indígenas de este movimiento vienen siendo objeto de una persecución sistemática que datan desde el año 2016 y se ha materializado en amenazas de muerte, atentados terroristas y secuestros, simplemente por su convicción de defensores de los derechos humanos y sus constantes denuncias en contra de la corrupción que carcome a la etnia más grande del país'.
Solicitaron al Estado, a la comunidad Nacional e Internacional, a los organismos de control y de seguridad más garantías de pervivencia para los líderes sociales y defensores de los derechos humanos. 'Condenamos y rechazamos todo atentado de muerte en contra de la vida de quienes se atreven a denunciar la corrupción sistémica en nuestro país'.