Las autoridades del departamento de La Guajira, en un trabajo que es coordinado por Migración Colombia, continúan brindando garantías para que migrantes venezolanos sigan retornando a su país de una manera segura.
Miguel Romo, director regional de Migración en La Guajira, indicó que desde el pasado 15 abril, cuando se habilitó el corredor humanitario por la frontera con Maicao, y hasta la fecha, 1.748 migrantes han regresado a su país.
Custodiados por la Policía, con servicio de ambulancia a disposición y sin hacer ningún tipo de parada, los buses llegan directamente a Paraguachón donde el Ejército y la Guardia Venezolana se encargan de velar por el paso seguro de los migrantes.
'Esto es necesario, ya que estamos en emergencia sanitaria, por eso hay que cumplir con protocolos de bioseguridad y de esa manera evitamos propagación de contagio de coronavirus; es por la seguridad sanitaria tanto de los habitantes de La Guajira, en especial Maicao, como para los mismos migrantes que están en el proceso de retorno' indicó Miguel Romo.
Explicó el funcionario que un aspecto que está generando preocupación es el ingreso de los migrantes 'caminantes', que son venezolanos que traviesan el territorio a pie pese a los controles que hay en las vías.
Según Migración, este fenómeno lo han detectado porque cuando van a cumplir con la entrega de los migrantes a Venezuela, el reporte oficial es de 300 0 400 personas, y se encuentran con que hay hasta 500 y 600 personas.
'Esos otros llegan caminando y eso si es un riesgo, ya que no hay un control de su estado de salud, son personas que deambulan en Maicao hasta lograr atravesar la frontera; por eso con el gobernador y el alcalde de Maicao se está buscando apoyo de organizaciones internacionales, para contar con un sitio donde estas personas puedan permanecer, mientras se les resuelve su situación' afirmó Romo.
Cabe indicar que los ciudadanos venezolanos buscan retornar a su país, ya que a raíz de la emergencia sanitaria por la COVID-19, no tiene como sostenerse en Colombia y padecen especialmente por la falta de recursos para alimentarse y pagar arriendo.