Una familia de la etnia zenú que reside en el municipio de Maicao solicita ayuda a las autoridades de salud para que les realicen la prueba de COVID-19 a algunos de sus miembros, ya que el padre resultó positivo y estuvo hospitalizado.
Jorge Luis Hernández afirma que fue ingresado al hospital San José de Maicao el pasado 27 de junio con síntomas de la enfermedad, donde recibió el tratamiento y fue dado de alta tres días después.
Posteriormente el 6 de julio una funcionaria que llegó de Riohacha le informó que había resultado positivo para COVID-19 y que debería aislarse.
'Me dijeron que mi núcleo familiar también tenía que hacerse la prueba, pero hasta el momento no han venido. Me informaron que esa notificación se la pasarían a la alcaldía de Maicao para que las realizaran. Además me ha tocado comprar el tratamiento para seguirlo en mi casa', explicó.
Su esposa tiene ocho meses de embarazo y en cualquier momento entra en labores de parto, mientras que sus dos hijos tienen 12 y 10 años de edad. Los tres están afiliados a Cajacopi, pero dice que aún no han ido a hacerle las pruebas.
Adicionalmente el señor Jorge Luis, quien es mototaxista no trabaja hace más de un mes por la enfermedad y además porque le robaron la moto que tenía para buscar el sustento para su hogar.
Dairo Ballesteros vecino del sector y también de la etnia zenú afirmó que es una situación bastante delicada, ya que así como el señor Jorge Luis, hay muchas familias en el sector que no han recibido ayuda por parte del gobierno.
'Me he comunicado con la alcaldía de Maicao, donde fui atendido muy bien, pero creo que falta un poco más de esfuerzo por parte de los involucrados en esta batalla', manifestó.
Posteriormente le informaron que debía comunicarse con la línea de atención al COVID-19 de la Gobernación, pero 'se encuentra fuera de servicio'.
'Realmente no sabemos a quién acudir, es triste ver una familia que ni siquiera tiene para comer, con un positivo, una mujer embarazada y dos niños ante la indiferencia de las autoridades', indicó.