A partir de las 3:15 de la tarde de este lunes Sintracarbón inició la huelga en Cerrejón, tal y como lo habían decidido los trabajadores el pasado 20 de agosto en la votación que se hizo para la solución del conflicto laboral.
Según el sindicato ya se ha notificado a la multinacional y a las autoridades del trabajo sobre la parálisis, que se dio a pesar de la intermediación del ministerio de Trabajo.
'Son dos temas los que había que resolver: la negociación propiamente dicha y la imposición del turno de la muerte (7x3-7x4) que Cerrejón insertó de manera paralela al conflicto colectivo de trabajo', afirma la organización sindical en un comunicado.
Aseguran los trabajadores que 'este es un nuevo portazo que dio la multinacional cuando planteó que el turno va mañana 1º de septiembre, que es una decisión de patrón y que no es objeto de negociación, a pesar que se le demostró que por una parte afecta ítems neurálgicos de la convención colectiva de trabajo (por ejemplo art. 42.- Transporte Terrestre, entre otros) y además su imposición aún tiene muchas dudas por resolver de orden médico, de seguridad y salud en el trabajo, financiero, empleabilidad, social y jurídico'.
Indican que 'la única responsable de la huelga es la empresa y así debe responderle a la nación, a la región, a los trabajadores y a la comunidad y que esta organización sindical solo está ejerciendo un derecho, en el marco de la constitución y la ley y en defensa de las condiciones laborales, sociales y familiares de nuestros representados'.
Reconocen que será una huelga dolorosa, pero agregan que es un sacrificio para salvaguardar la vida, la dignidad, la salud, el tejido social y familiar.
Cerrejón por su parte ha advertido que cada día de huelga en Cerrejón le cuesta a La Guajira y a Colombia cerca de 7.000 millones de pesos. 'Esta cantidad incluye lo que deja de percibir el departamento y el país en términos de impuestos y regalías, pero también otros conceptos como los salarios y beneficios que reciben los trabajadores y todos los servicios que tiene contratados la Compañía. Esto supone reducir la capacidad del departamento para hacer inversiones sociales y frena el desarrollo de la región', asegura el vicepresidente de la compañía Juan Carlos Consuegra.
La multinacional asegura que esta decisión del sindicato coincide con uno de los momentos más retadores vividos por la Compañía, que en los últimos años ha visto caer la demanda y precio del carbón. 'La empresa se ha enfrentado a fallos judiciales que no han permitido acceder a reservas de carbón más rentables y, en los últimos meses, ha registrado la cifra de exportaciones más baja en los últimos 18 años: 9.5 millones de toneladas. Todo esto ha originado que en el primer semestre de 2020 la empresa haya tenido una pérdida de más de 368.000 millones de pesos', indicó Consuegra.
Dijo además que 'ante la huelga anunciada por el sindicato, en Cerrejón ya hemos puesto en marcha el plan de contingencia, avalado por las autoridades correspondientes para proteger nuestros activos mientras dure el cese de actividades. Entre lo que hemos decidido dejar activo, se encuentra el plan de medicina prepagada para garantizar a nuestros trabajadores y sus familias una atención oportuna durante la época de pandemia'.