Después de 49 días de huelga Cerrejón y el sindicato Sintracarbón regresaron a la mesa de negociaciones del conflicto laboral iniciado el pasado mes de julio, con la denuncia de la actual convención colectiva de trabajo por la organización sindical.
Según Sintracarbón el acercamiento se da por gestiones que realizaron ante autoridades administrativas, legislativas y de control nacional, para que desde sus capacidades buscaran que la empresa regresara a la mesa de negociaciones y abriera la posibilidad de discutir el pliego de peticiones.
Para este reinicio de la negociación las partes designaron subcomisiones que en los próximos días deberán definir la metodología y aclarar las expectativas de Sintracarbón y Cerrejón en esta nueva etapa de diálogos.
Sintracarbón dijo que espera que la negociación resuelva el pliego de peticiones presentado por la organización, que no representa aumentos en los costos de la compañía a 2020.
También pretenden construir un consenso sobre los turnos de trabajo de la empresa, buscando que estos no afecten la calidad de vida, la salud, la jornada laboral y a las familias de la base trabajadora, tal como afirman.
Voceros de Sintracarbón han precisado que la reapertura de la negociación no permite todavía establecer una fecha de reanudación de operaciones, así como tampoco significa que esta organización sindical esté abierta a aceptar la imposición del lesivo 'turno de la muerte', como lo llaman.
Cerrejón informó por su parte que el domingo se reunieron subcomisiones de las comisiones negociadoras de ambas partes para la búsqueda de un acuerdo que 'permita continuar brindando bienestar a los trabajadores, sus familias, las comunidades, La Guajira y el país, y al mismo tiempo asegure la sostenibilidad y competitividad de Cerrejón en un momento tan retador del mercado del carbón, agudizado por la crisis generada por la pandemia del COVID-19'.
La empresa indicó igualmente que durante esta semana espera continuar con la exploración de alternativas que permitan superar las diferencias existentes.
Paro de wayuu en salinas
Las comunidades wayuu de Manaure iniciaron ayer un paro en el sector de Wayaca para reclamar sus derechos sobre toda la territorialidad indígena, así como la explotación y utilidades económicas de las salinas.
El argumento se basa en el incumplimiento del Estado en hacer valer la Constitución Nacional que les otorga dichos derechos.
'La Asamblea y la Gobernación de La Guajira han omitido la derogación de la ordenanza 015 de 1973, que creó el municipio de Manaure y desobedecen los precitados artículos', afirma el abogado y palabrero Luis Mejía, defensor de indígenas.
Afirma que el artículo 286 dispone que este territorio sea una entidad territorial indígena, por lo tanto es una incompatibilidad constitucional que exista una entidad territorial municipal en esa jurisdicción.