Corpoguajira informó que, en el departamento de La Guajira, los guardianes de ambiente y paz y voluntarios, pudieron avistar tres ejemplares del Cóndor de los Andes, ave insignia en Colombia.
El conteo se desarrolló de manera simultánea tanto en la Serranía del Perijá, Cerro Pintao y Cerro Bañadero con la participación activa de expertos en aves y guardianes ambientales y con el apoyo del grupo Acciona que se sumó a esta iniciativa que busca recopilar información sobre hábitos y población del Cóndor de los Andes.
Según la Corporación, los que se vieron fueron dos juveniles y un subadulto durante los días 13, 14 y 15 de febrero, fecha en la que se llevó a cabo el Primer Censo Nacional del Cóndor Andino, en todo el territorio nacional a lo largo de la cordillera de los Andes.
Explica que la actividad se realizó donde hay una actividad influyente de la especie, en departamentos como La Guajira, Santander, Norte de Santander, Boyacá, Cundinamarca, Tolima, El Cauca, Valle del Cauca, Nariño, Magdalena en la Sierra Nevada, Cesar y los de las Cordillera Central cercano a los nevados.
El Cóndor de los Andes (Vultur gryphus), pesa entre 9 y 15 kilos y es considerada el ave voladora más grandes del mundo y de Colombia; los expertos estiman que alrededor de 130 cóndores viven en los Andes colombianos, sin embargo, está en peligro crítico de extinción en el país y casi amenazado a escala global, debido al bajo número de individuos existentes en su área de distribución, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Corpoguajira dice que esta situación es ocasionada principalmente por el deterioro y transformación de los hábitats como consecuencia de los asentamientos humanos y la expansión de la frontera agrícola hacia los bosques andinos y páramos, también por la cacería de la especie al considerarse equivocadamente una amenaza para la ganadería.
La especie, que solo pone un huevo cada dos o tres años y se distribuye desde Venezuela hasta el sur de Argentina y Chile, nunca había sido censada por lo que el censo actual se convierte en el punto de partida para seguir estimando de manera real, la población de cóndores en el país, lo cual será una herramienta para las Corporaciones Autónomas Regionales, CAR y organizaciones responsables de su conservación.