La probable inhalación de monóxido de carbono que fue expelido por el mofle de una camioneta en la que ingresó a un motel del municipio de Uribia, acabó con la vida del joven Fredy Henríquez Palmar, quien no logró despertar del sueño profundo que causa ese mortífero gas.
El hecho fue descubierto en la madrugada de este lunes, luego de que el hombre de 29 años de edad ingresara al establecimiento solicitando el servicio de una habitación y al parecer dejó su camioneta Toyota Burbuja encendida lo que generó una cantidad de monóxido de carbono suficiente como para intoxicar su sangre y causarle la muerte.