Yasmely Chiquinquirá Carrasquero Villalobos de 51 años y su hija de 16, fallecidas como consecuencia de un accidente de tránsito del bus donde se desplazaban de Barranquilla a Maicao, estaban residenciadas en el barrio Villa Blanca de la capital del Atlántico, donde a pesar de no ser de esta ciudad y no ser colombianas sino venezolanas, habían logrado ganar la simpatía y el respeto de sus vecinos.
Albin Carrasquero, quien se acercó a la morgue de Medicina Legal en Maicao a reclamar los restos mortales de su hermana y su sobrina, sostiene que ellas estaban en Colombia desde hace tres años y les había ido muy bien, pues Yasmely era una mujer trabajadora y emprendedora y una extraordinaria madre de tres hijos.
Indicó que en la actualidad estaba laborando como docente de higiene dental en una institución no formal, donde su hija estudiaba el último grado de bachillerato.