'Somos una compañía abierta al diálogo', fueron las primeras palabras emitidas por la compañía Cerrejón, de Glencore, luego de rechazar los bloqueos 'ilegales' de la línea ferrea, a la altura del kilómetro 32 (en Maicao) y en el kilómetro 132 (en Uribia), que afectan la operación de la mina.