Beatriz Salas, una de las jóvenes que se encuentra en huelga de hambre en Riohacha, tuvo que ser trasladada a un centro asistencial por las complicaciones de salud que tuvo en el décimo día de la protesta.
El médico Spencer Rivadeneira, quien ha estado apoyando a los huelguistas, la atendió, le hizo una revisión general y recomendó que fuera tratada en una clínica para que pudiera ser estabilizada.
La joven fue despedida con aplausos por parte de sus compañeros y las personas que se encuentran respaldando la protesta por su fuerza, valentía y determinación.
'Esperamos que se recupere pronto y que vuelva, pero si toma la decisión de abandonar la huelga, seguiremos apoyándola porque sabemos que dio todo durante estos días que estuvo en luchando', aseguraron los manifestantes.