El ambiente está húmedo, sofocante pero respirable. Las gotas del mar brincan tras el estallido entre las olas y las playas y las rocas y las pieles. Se viene encima con su fogosa naturalidad tras los espasmos inolvidables del choque que antecede todo. Aunque lo presientas, siempre estalla cuando quiere con su estruendoso gemido marino. Así lo veas de frente.
No es una accidental añoranza a entrelazar tus dedos, a erizarte, a excitarte frente al mar Caribe. O tal vez sí, pero viajando a través de las historias y los relatos eróticos, a veces tan punzantes hasta balancearte sin sobresaltos en un cómodo vaivén de hamacas. Sí, el escenario vuelve a aparecer, todo huele a trópico, pero también con días grises y noches de penumbra total donde la agonía puede abrirte la ventana hasta que sientas el aroma relajante que empieza con una caricia o el peso nebuloso de la desgracia.
Acaban de entrar a Un mar en calma y otros cuentos de amor y sexo, la realidad literaria que propone y desarrolla en nueve relatos, la barranquillera Beatriz E. Mendoza Cortissoz, radicada en Miami, Estados Unidos. En cada página brotan oleadas de sensaciones arropadas con un vocabulario preciso, sutil, sin mayores pretensiones estéticas que la de envolver en nueve relatos surgidos desde las entrañas de una psiquis que solo encuentra regocijo mental a través de la escritura.
Es un proceso introspectivo, es abrir un cofre lleno de preguntas, de miedos, de proyecciones. Hurgar en la consciencia hasta llegar a los recovecos de la condición humana, revelarlos. Es un coqueteo desde la capacidad peculiar literaria de Beatriz Mendoza de invitarte a sus relatos provocadores de melancolía, ansiedad y tristeza; abrazándose con libidinosas escenas que surgen, tal vez con la única excusa de seguir liberando palabras, historias.
Un mar en calma y otros cuentos de amor y sexo transitan en medio de ciudades como Barranquilla, Bogotá y Miami donde la autora ha vivido alimentándose de experiencias y memorias a las que acudió para desnudarse en letras. Y una historia surgida en Madrid.
El contexto de la guerra que atraviesa la historia de Colombia y el narcotráfico, son algunas de las atmósferas que rodean el libro, así como la soledad y la amistad tejen las escenografías que encontrarás en cada gota traslúcida que brota de la imaginación de la poeta, narradora y periodista de amplia trayectoria en medios de comunicación de los Estados Unidos.
