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Dejar a un propietario endeudado con el pago de lo servicios se ha vuelto una práctica usual entre los inquilinos. Sin embargo, principalmente por desconocimiento, muchos dueños deciden aplicar el refrán ‘más vale un mal arreglo, que un buen pleito’ y terminan por asumir las deudas que no les pertenecen.

Esta situación puede ser controlada desde la misma realización del contrato. El dueño del inmueble está en todo el derecho de dirigirse a las oficinas de las empresas prestadoras de los servicios para notificar que lo ha cedido.

De esta manera, las deudas serán, legalmente, de los inquilinos y así, el inmueble no podrá quedar vetado para contratar con las empresas de servicios. Es decir, el dueño puede arrendar nuevamente sin que la deudas afecten su negocio.

A lo legal. La Ley 820 de 2003 es el sustento legal que cubre los contratos de arrendamiento. No obstante, la misma es clara al referirse a la solidaridad entre las partes. En otras palabras, las obligaciones económicas, en este caso el pago de las facturas de servicios básicos, puede asumirse por cualquiera de los dos: arrendador o arrendatario. Por lo tanto, si la notificación no fue hecha a las empresas de servicios y el inquilino abandona el inmueble sin estar al día con los pagos, será el propietario el que los asuma. Los dueños pueden exigir a sus arrendatarios garantías como pólizas o demás documentos que certifiquen el compromiso.

Las compañías deben ser informadas mediante un documento o denuncio de contrato, el cual permite saber que el nuevo vínculo será con el inquilino. Además, le otorga facultades para ejercer acciones legales en caso de que incumpla en los pagos.

Algunas empresas solicitan garantías distintas a las de la Ley. Algunas de las anteriores son estar al día con el pago de las facturas de servicios y que arrendador y arrendatario no estén reportadas en el sistema Datacrédito.

Por Lucía Avendaño Gelves

Voces en Facebook

Dilia Serna
En mi caso, tuve unos inquilinos que se fueron sin avisarme, sin pagar el arriendo de varios meses ni las facturas de los servicios públicos. Me dejaron las cuentas y me tocó pagar todo. Hasta el día de hoy no han aparecido.

Vanesa Arias
La última vez que di en alquiler una casa y se fueron dejándola mal pintada y sucia. La vez anterior a esa, se la había arrendado a una señora que era supuestamente amiga de la familia. Me tocó pagar un millón de pesos en la factura del servicio de luz. Además, me quedó debiendo 3 meses de arriendo. Todavía estoy cumpliendo con los convenios de pago con Electricaribe.

Mary Ruiz
Unos exvecinos ruidosos se fueron sin pagar las facturas de la luz.