Aunque resulte una especie de colombianada más, o un síntoma del desbalance social, o quizás una simple treta de avivatos irresponsables, en nuestra región se ‘roban’ hasta el gas natural, sin importar el riesgo que esta actividad ilegal implica para la persona que manipula la red o tubería, y para las edificaciones cercanas.
Según la empresa Gases del Caribe, anualmente se detectan unos 300 casos de fraude en los departamentos del Atlántico, Magdalena y Cesar, divididos en dos modalidades: la manipulación de medidores, por un lado, y las derivaciones ilegales, por el otro.
El Atlántico lleva el poco honroso primer puesto, con cerca de 200 casos que se presentan anualmente, acumulando la mayoría de fraudes contra la red gasífera a lo largo del año en estos tres departamentos.
En 2011, el detrimento patrimonial por fraudes que sufrió la empresa Gases del Caribe fue de $197.854.233. En 2012, fue de $ 272.222.132. Y hasta junio de este año, de $234.558.273,00.
En ese sentido, en el año 2011 se reportaron, incluyendo los tres departamentos, 334 casos. En el 2012 fueron 295, y en el presente año ya se contabilizan 283.
Este año, la empresa lleva registrados 162 casos de manipulación de medidores, 62 casos de conexiones ilegales y 3 de violación de la suspensión del servicio.
EL HERALDO acompañó ayer a varios funcionarios de esta empresa al municipio de Baranoa para atender una denuncia de la comunidad sobre fuertes olores y de una posible conexión fraudulenta al servicio de gas en una lavandería ubicada en el barrio el Topacio.
'Todos los moradores del barrio hemos notado el olor a gas, y eso viene pasando desde que montaron la lavandería', apuntó Wilson Reyes, vecino del sector.
En una edificación solitaria de donde escapaban las notas de canciones cristianas a todo volumen, los funcionarios se cansaron de llamar a la puerta y de esperar a que se reportaran los responsables del predio. Lo primero que se encontró en el lugar fue que no tenía ningún medidor que determinara el consumo del servicio. Fue la primera señal de que, efectivamente, se trataba de un caso de conexión ilegal.
Luego de cavar en varios puntos, el equipo de técnicos de la empresa encontró a varios metros de la edificación y a unos pocos pasos de la vivienda vecina el lugar donde se realizó la derivación fraudulenta.
'Yo sí sentía el olor, pero no le paraba bolas. Menos mal encontraron eso, porque aquí vivimos cuatro personas, y dicen que eso es peligroso', comentó una mujer de avanzada edad que vive justo al lado de donde se halló la conexión fraudulenta.
Los funcionarios procedieron al corte y a bloquear el flujo del gas, retiraron la conexión ilegal y los cerca de 70 metros de tubería de polietileno que conectaban a la lavandería con la red, atravesando un patio.
Según Mauricio Arcieri, secretario general de la empresa Gases del Caribe, cuando se detecta un fraude se inicia un proceso administrativo que tiende a verificar entre los usuarios si hubo unos consumos que no registraron los medidores. 'Los tipos de fraudes más comunes son manipulación de los medidores o derivaciones antes de medición, que permiten consumir sin pagar factura', afirmó.
Arcieri fue enfático al afirmar que estas instalaciones fraudulentas no cumplen con las normas técnicas y ponen en peligro tanto la vida de las personas que manipulan la red, como las mismas propiedades de los usuarios.
Lavanderías, restaurantes, aserraderos, negocios de comidas rápidas y venta de fritos en la calle, son los violadores más comunes y los que más emplean este tipo de conexiones fraudulentas o alteran los medidores para que no registren los consumos y así pagar menos por el servicio, explicó Arcieri.
'Después del debido proceso administrativo y de haberle suspendido el servicio, se le cobra a los usuarios esos consumos no facturados', agregó.
En el año 2009 , en el populoso barrio Las Américas, en una vivienda ubicada en la carrera 3B con calle 52, se presentó un incendio que afortunadamente no cobró víctimas. Según testigos, un residente de la zona cavó un agujero con la intención de conectarse de manera fraudulenta a la tubería de gas, cometiendo la torpeza de llevar en su mano para mayor visibilidad una veladora encendida. Al romper la tubería el gas entró en contacto con el fuego y se produjo la ignición. El despistado e irresponsable sujeto sufrió heridas y quemaduras en sus manos y rostro.
'Las presiones que maneja nuestra red no dejan lugar a que ocurra un accidente a gran escala, pero si podría ocasionar un daño tanto a la vivienda como a la persona que la manipula de esta forma irresponsable. Nunca usan los materiales y las herramientas adecuadas y no cumplen con las mínimas normas de seguridad' explicó Arcieri.
Aprovechó la ocasión para pedirle a la comunidad entera que se abstenga de realizar este tipo de fraudes y que siempre denuncie este tipo de casos, porque las evidencias siempre quedan y esta empresa no está dispuesta a dejar pasar este tipo de ilegalidades. Además, una denuncia hecha a tiempo puede evitar tragedias y muertes debido a intoxicaciones, explosiones o incendios.
'A nosotros, lo que más nos interesa es la seguridad de las personas. Y repito que no deben exponer la vida de esta manera por ahorrarse unos cuantos pesos', afirmó.