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Esto no es un testimonio lastimero. Al menos así lo ve Simón Ortiz*, un hombre al que le diagnosticaron en 1991 VIH positivo, a quien le dieron una expectativa de vida no superior a los tres años y que aún, como dice él mismo, está dando lata.

Cuando aquello sucedió, se vino a Barranquilla a morir hace 22 años, sin saber que venía a darle muerte a la ignorancia, especialmente a aquella que en este año reportó a 397 nuevos infectados con el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida y que le ha cobrado la vida a 14 personas en lo corrido del 2013. Es que Simón, hace 13 años, descubrió un nuevo propósito en su vida: convertirse en un abanderado de la educación en temas de salud sexual y reproductiva, para que los jóvenes y adultos adopten comportamientos más seguros y preventivos.

En los últimos años, Simón ha centrado su trabajo con poblaciones vulnerables donde ha dedicado especial atención a habitantes de la calle, mujeres transexuales, trabajadoras sexuales y gente del común que posee poca información sobre derechos sexuales. Y es que el grupo que él trabaja se registra potencialmente en peligro de infección, pues los datos estadísticos establecen que en las localidades Sur Occidente y Sur Oriente de Barranquilla, los índices porcentuales de VIH positivo concentran cerca del 70% del total registrado en la ciudad.

Simón recuerda que cuando a él lo valoraron como cero positivo, no tuvo información clara sobre su proceso, incluso, al asistir a sus citas médicas, ni siquiera el doctor se atrevía a tocarlo. Sin embargo, su visión, ante lo que representaba una talanquera en su vida, cambió cuando conoció a personas que tenían las mismas condiciones de salud que las suyas y que lo afrontaban con valentía y optimismo. 'Eso me motivó a actuar a favor de los que no saben cuáles son sus derechos', afirma este hombre, que ahora se dedica a motivar y a ayudar a gente infectada o en riesgo de infección.  

De acuerdo a cifras entregadas por la Secretaria de Salud Distrital, en los últimos seis años se registraron 2.232 casos de VIH en Barranquilla. No obstante, desde el 2009 a la fecha, se ha dado una leve disminución del 3.87% en las estadísticas entregadas, en donde el rango de edades donde predominaron los reportes fue entre los 20 y los 39 años, siendo más afectados los hombres que las mujeres, cuyas orientaciones heterosexuales son mayormente heterosexuales.

A esto, Simón López, asegura que mediante su fundación ha tenido la posibilidad de conocer numerosos casos y, para él, 'muchos de los hombres que responden a haberse infectado con una práctica heterosexual, es porque realmente ha ocurrido en un encuentro sexual con otro hombre, solo que no se atreven a decirlo o reconocerlo'.

En la actualidad, 22 años después de aquel diagnostico apresurado que lo llevó a vivir el día a día sin pensar en lo que llegaría después, su vida cambió en varios aspectos, ahora visita cada mes a su médico, toma juiciosamente su medicamento antirretroviral y se dedica a participar en escenarios locales, nacionales e internacionales con la socialización de su trabajo por la defensa de los derechos humanos, sexuales y reproductivos.

Pero él, reconoce que el trabajo aún no ha sido concluido y dos temas le preocupan: 'Falta intervención que haga saber que es mucho mejor no estar infectado que estarlo' y que 'El VIH afecta más a las mujeres que a los hombres porque estas son las que se encargan de las bases del hogar' y esta enfermedad puede acortar su expectativa de vida. 

Mujeres, a usar condón femenino. El curioso método anticonceptivo es de látex, por lo menos dos veces más ancho que el empleado por los hombres, posee dos anillos interiores y aún no está disponible en el mercado nacional. Con este, se pretende entregar a las mujeres una nueva herramienta que ha sido socializada en varios países y que permite a la mujer a decidir más sobre su salud sexual.

Este novedoso condón llegó por primera vez al país como parte de las estrategias que el Fondo Mundial de Lucha contra el Sida, en coordinación con el Ministerio de la Salud y la Secretaría de Salud Distrital, busca impulsar entre la población femenina de la ciudad. En primera instancia, se realizará una prueba piloto con mujeres de distintas localidades, entre quienes repartirán 20 mil condones, para que luego den a conocer su percepción y aceptación sobre este anticonceptivo.

Por su parte, Alma Solano, Secretaria de Salud Distrital, recordó que esta campaña hace parte de las estrategias que se vienen implementando para prevenir el aumento de casos por VIH en Barranquilla. 'La mujer puede hacer el cambio, esto será algo difícil de asumir, pero la mujer debe tener derecho a tomar esta decisión', puntualizó finalmente Solano.