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Para Eledirma Arrieta de 61 años, el perdonar se ha convertido en una necesidad espiritual. 'Si no lo perdono, Dios no me perdona'. Ella hace parte de las 600 víctimas a quienes Edgar Fierro, alias Don Antonio, dentro de los exhortos de la sentencia que ordena concederle la libertad, deberá ofrecerle disculpas públicas 

Cuenta esta madre, que un 24 de mayo de 2004, en el municipio de Soledad, hombres armados le quitaron la vida a uno de sus tres hijos. Según la versión de Don Antonio, porque él era un informante del ejercito.

La sentencia dictada por la magistrada Zoraida Anyul Chalela ha causado polémica entre las víctimas del ex paramilitar. Para muchos de ellos ‘Don Antonio’ tiene aún pendientes con la justicia.

Las disculpas públicas de acuerdo con la Ley de víctimas tiene que ofrecerla a las víctimas de los municipios del departamento del Atlántico donde fue su accionar delictivo a cargo del Frente Pablo Díaz del Bloque Norte de las Autodefensas.

Entre los municipios del Atlántico afectados por el Paramilitar está Soledad, Sabanalarga y Barranquilla. A diferencia de los otros departamentos de la Costa Atlántica, el accionar de los hombres a cargo de alias Don Antonio en el Atlántico no fue por el apoderamiento de territorio o de tierras, sino de un control político, económico a través de asesinatos selectivos, explicó Diandra Escudero, coordinadora del programa de víctimas de la Gobernación del Atlántico.

Para muchas de las víctimas que se dieron cita en la feria de servicios integrales en el estadio de balocento, Elias Chegwin, el perdón no es suficiente para reparar el sufrimiento que por varios años los ha acompañado.

Eledirma es una de las 600 víctimas de Edgar Fierro en el Atlántico reconocidas por el Estado que asistió a esta feria convocada por la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas y el Fondo para la Reparación de las Víctimas.

De acuerdo con el Tribunal Superior de Justicia y Paz de la Sala Judicial de Bogotá, existen 1.700 víctimas entre directas e indirecta en los departamentos del Atlántico, Cesar y Magdalena.

Entre las víctimas que se acercaron al evento se encontraba una joven de 21 años, quien pidió reserva de su nombre por seguridad. Ella narra que fue desplazada junto con su familia cuando era solo una niña de una finca del municipio de Luruaco, Atlántico.

A la pregunta si perdonaría a Edgar Fierro, Afirma que para ella y otros afectados es muy difícil perdonar, 'es muy duro, por más que yo quiera perdonar es muy difícil' y añadió 'a la final sí yo lo perdono o no, a él le dará igual'.

Desde su experiencia vivida durante estos años dentro del programa de Reparación de Víctimas, el acompañamiento del Estado ha sido satisfactorio, 'he tenido la oportunidad de seguir estudiante y mi meta es convertirme en abogada'.

Por el contrario para el hijo de Nelson Mejía, alcalde de Santo Tomás asesinado en el 2004 por orden de Edgar Fierro, no ha sido satisfecho para el proceso de Justicia y Paz.

'En mi caso no estoy satisfecho. Aún desconozco porque realmente mataron a mi padre. Esta es la pregunta nos hacemos siempre'.

Según él, pese a ser víctima no ha sido reparado y desconoce el por qué.

Oferta institucional. Ayer 300 de las víctimas tuvieron acceso a la oferta institucional que ofreció la Unidad de Víctimas y la Gobernación del Atlántico, como la Registraduria nacional, el Fondo Nacional del Ahorro, el Incoder, la Unidad de Víctima, entre otros. La Alcaldía se vinculó a través de la secretaria de Salud distrital, con una jornada de vacunación.

'El objetivo del evento es que los afectados por Edgar Fierro tengan acceso a la oferta institucional y conozcan cuáles son sus derechos como víctimas ya reconocidas en el registro único a nivel nacional' afirmó Alfredo Palencia, director territorial de la Unidad de Víctimas del Atlántico.