La estructura del Castillo San Antonio de Salgar está en riesgo por cuenta de la naturaleza. Como efecto de la erosión costera, cada día la presión de las olas deteriora las bases del acantilado sobre el cual fue construida la edificación desde 1848.
El fenómeno natural viene afectando este sector de las costas del Atlántico desde 1935, tras la construcción de las obras de Bocas de Ceniza, de acuerdo con el director del Instituto de Estudios Hidráulicos y Ambientales (Ideha), Manuel Alvarado Ortega.
La ausencia de obras de mitigación entre el Castillo y Pradomar agravan el problema, que podría acabar con este monumento histórico y cultural del departamento.
'Muchos habitantes de ese sector han tenido que construir, con sus propios medios, obras de defensa en la base del acantilado. Tendrían que hacer trabajos para construir el Castillo. Sobre todo hacia el sector de Puerto Colombia', señala el ingeniero Manuel Alvarado.
El director de la Ideha advierte que el fenómeno natural ha avanzado en ese tramo y que la erosión está activa hasta el hotel Pradomar.
Alvarado sostiene que estos procesos de erosión se hacen más graves cuando se presentan eventos como mares de leva, paso de huracanes u oleajes fuertes, como los que ocurren entre diciembre y abril. 'Hay que proteger el talud del Castillo de Salgar', enfatiza el ingeniero.
Jairo Certain, director administrativo de Comfamiliar, que tiene a su cargo el manejo del Castillo, dice que hasta el momento la erosión no ha afectado la estructura del mismo, pero que 'no estaría demás un enrocado en la parte baja para prevenir futuras afectaciones'.
Obras. El gobernador José Antonio Segebre se mostró 'preocupado' por la erosión de la zona del castillo de Salgar y anunció que en los próximos días llevará unos expertos de la Universidad del Norte para que revisen el problema y busquen soluciones al mismo. 'Noté unos deslizamientos', afirmó.