El agua destinada a abastecer a los 43 mil habitantes de los municipios de Juan de Acosta, Tubará, Usiacurí, Piojó y sus corregimientos, estaba siendo desviada para abastecer, de manera fraudulenta, una laguna de 200.000 metros cúbicos (m3), ubicada en la vía Juan Mina – Cuatro Bocas (jurisdicción de Tubará). Así lo informó Triple A luego de unos operativos que identificaron la conexión ilegal.
Aunque esta no es la única desviación detectada en el acueducto costero, en lo corrido del año la empresa prestadora del servicio público ha identificado 52 fraudes más en la zona, que, en promedio, ocasionan pérdidas por 65.046 m3 de agua. Pese a esta situación, la cantidad de hurtos del preciado líquido ha disminuido con respecto al primer semestre del 2014, cuando habían ‘pillado’ a 228 infractores de la ley. Para el año pasado, el promedio mensual era de 85.573 metros cúbicos de agua robada.
Precisamente, la situación de 2014 ocasionó que realizaran un Consejo Departamental de Seguridad en el parador turístico del Sombrero Vueltiao de Juan de Acosta, al cual asistieron el gobernador del Atlántico, la empresa Triple A, Policía, Ejército, Fiscalía y comunidad de algunas poblaciones.
MÁS CONTROLES. El gobernador José Antonio Segebre destacó que luego de las reuniones del año pasado haya disminuido la cantidad de fraudes, pero afirmó que 'hay que seguir trabajando' en el tema porque esto 'afecta a muchas personas'.
'Seguimos luchando contra estos hurtos. Eso le hace mucho daño al sistema porque le quita mucha capacidad para brindar un buen servicio a los usuarios de esos municipios. Vamos a programar nuevos operativos en el sector que permitan detectar si hay más conexiones ilegales', advirtió el gobernador.
Respecto al caso de El Salao, Triple A reportó que encontraron al interior de la mencionada finca una conexión irregular de una tubería de 1 pulgada, empalmada a la purga de la red de conducción (18 pulgadas), que estaría siendo utilizada para el llenado de la mencionada laguna, que tiene una dimensión de 14 hectáreas, aproximadamente.
El líquido al parecer también era utilizado de forma ilegal para el riego de cultivos de maíz y la cría de ganado y carneros en el lugar, según la empresa de acueducto.
'Realizamos un gran esfuerzo técnico y humano para llevar el agua potable a los municipios del Acueducto Costero a través de una extensa red de tuberías y este tipo de casos deterioran la continuidad y calidad del servicio y generan todo tipo de inconvenientes para los usuarios', manifestó el gerente de operaciones de Triple A, Ramón Hemer.
La empresa estimó que con el agua que se estaba extrayendo irregularmente en la finca El Salao se podrían abastecer, durante 20 días continuos, los 43 mil habitantes de las 4 poblaciones del Acueducto Costero, incluidas las playas y corregimientos.
Marco legal
La Corte Constitucional eliminó la potestad a las empresas de servicios públicos de cobrar sanciones pecuniarias por fraude, pero por autorización de la Comisión Reguladora de Agua Potable, la empresa de servicios públicos podrá cobrar el agua no facturada hasta por un equivalente a cinco meses de consumo.
De acuerdo con las nuevas normas, que rigen desde el 17 de febrero de este año, 'se presumirá que la duración de la anomalía es de 5 meses, salvo que la empresa o el suscriptor prueben que el tiempo fue inferior o superior'.