Con una curva, el Consorcio de Barranquilla, que ejecuta los trabajos de ampliación de la carrera 51B entre la calle 84 y 85, arregló una desviación en el separador de la vía. Hace dos semanas, vecinos del sector, a través de las redes sociales, habían expresado su preocupación por lo que consideraban una 'falla'.
La adecuación en el separador se efectuó los pasados 8 y 9 de septiembre. Los trabajos son ejecutados dentro del eje ‘Barranquilla Competitiva’ para el mejoramiento de la conectividad del sistema de vías internas y tuvieron un costo de 4.485 millones de pesos.
En diálogo con EL HERALDO, el representante legal de la firma contratista, Edgardo Osorio, aseguró que 'no se hizo ningún tipo de arreglo o adecuación'. Según él, la desviación o deflexión estaba 'prevista' dentro del diseño. 'Esos bordillos van así, son dos curvas horizontales con ángulos de deflexión de 2 grados y 2,05 grados', explicó.
Indicó que si en su momento le hubieran entregado las parrillas para el box coulvert y el colector de aguas lluvias, 'hubiera instalado los bordillos enseguida'. 'Esas estructuras de acero necesitaban un tiempo para endurecer, por eso nos demoramos en anclar los pasadores', expresó el contratista.
Con dicha deflexión, Osorio afirmó que consiguió dejar el sendero peatonal de 1,22 metros. Y señaló que, desde el punto de vista vial, 'toda la obra va a quedar bien'.
La secretaria de Infraestructura del Distrito, Nury Logreira, explicó que esto es una obra 'imperceptible' para la circulación de los vehículos. 'Esto no repercute en un tema de seguridad, ni mucho menos', enfatizó.
Según la funcionaria, la comunidad del sector está 'tranquila y a gusto con los trabajos'. Expresó que desde el punto donde se tomó la fotografía 'hay una percepción y una sensación de un desvío impresionante, que pareciera que la persona se fuera a chocar con los separadores'.
Nury Logreira añadió que esta curva 'cumple' con todos los estándares de los criterios de 'diseño y de seguridad vial'. Aseguró que ellos como encargados de las obras de infraestructura nunca van a hacer 'trabajos que no vayan de acuerdo con las normas técnicas y que puedan afectar a la ciudadanía'.
Voces de los transeúntes. Durante los días que se presentó la situación polémica, las personas que transitaban por el sector de la desviación afirmaban que los constructores debieron tener en cuenta, primero, terminar la zona vehicular y, luego, dedicarse a los andenes.
En diálogo con este medio, el 5 de septiembre pasado, el arquitecto Alfredo Reyes Rojas, expresidente de la Sociedad de Arquitectos del Atlántico y actual procurador de la Sociedad Colombiana de Arquitectos, manifestó que sobre la obra de la carrera 51B se observaba 'la falta de coordinación entre distintos frentes de trabajo y en distintas etapas de la construcción'.
Reyes Rojas indicó que tampoco 'hubo la rigurosidad técnica que permitiera que se hiciera el empalme en la obra entre una etapa y otra'.
Finalización de la obra. La secretaria de Infraestructura afirmó que todavía no tienen una fecha estimada para la entrega del proyecto. 'Todavía dependemos de algunos permisos relacionados con tema del cierre de la vía, porque aún nos hace falta el empalme de la intersección de la calle 86', aseguró.